Franklin Almeyda, dirigente político de la Fuerza del Pueblo, falleció en su residencia, descrito por familiares y allegados como un hombre estricto pero de buen corazón. Con más de 20 años de trabajo junto a él, Ignacio Pérez, amigo de la familia y empleado, expresó que Almeyda no toleraba lo mal hecho, pero vivió de manera humilde a pesar de haber ocupado importantes cargos en el país. Pérez lo consideraba más que un jefe, un padre. Destacó que este viernes lo llevaría al cardiólogo a su consulta de rutina, lamentablemente falleció antes de poder asistir.
Ignacio Pérez, de 80 años, comenzó a trabajar con Almeyda como mecánico y con el tiempo se ganó su confianza gracias a su compromiso y buena voluntad. Se comprometió a seguir apoyando a la esposa de Almeyda, Josefina Pérez Gaviño. El sobrino de Almeyda, Gaetano Pellicce Pérez, señaló que su tío sufría de hipertensión y había sido intervenido quirúrgicamente dos veces. Destacó su estricta personalidad, pero también su cariño y preocupación por los demás más allá de la política.
Los restos de Almeyda serán expuestos en la Funeraria Blandino de la avenida Abraham Lincoln, en el Distrito Nacional. Se realizará una misa en la misma funeraria el domingo, además de un traslado a la Universidad Autónoma de Santo Domingo, donde se formó y ocupó la rectoría entre 1987 y 1990. Almeyda será expuesto en el Aula Magna de la UASD y luego en la sede de la Fuerza del Pueblo. Las actividades políticas del partido han sido suspendidas en su honor, incluyendo talleres y reuniones programadas.
Diversos dirigentes políticos e instituciones lamentaron la muerte de Almeyda, fundador del Partido de la Liberación Dominicana y funcionario en los gobiernos del PLD. El expresidente Leonel Fernández lo recordó como un compañero de mil batallas. Almeyda, de 83 años, fue un abogado y escritor, precandidato presidencial del PLD y ocupó el cargo de secretario de Interior y Policía durante el gobierno de Fernández. También era titular de la secretaría de formación política de la FP.
La muerte de Almeyda causó gran tristeza en su entorno, recordándolo como un hombre íntegro, estricto pero cariñoso. Sus allegados destacaron su humildad a pesar de sus importantes cargos políticos, así como su enfoque en cumplir las reglas y ser correcto en todo momento. Sus restos serán velados en la Funeraria Blandino, y se realizarán eventos en su honor en la UASD y la sede de la Fuerza del Pueblo. La suspensión de actividades políticas del partido refleja el impacto de su fallecimiento en la comunidad política de la República Dominicana.
