El diputado del Partido Revolucionario Moderno (PRM), Eugenio Cedeño, generó polémica al afirmar que su esposa debe tener relaciones sexuales con él incluso si ella no quiere. Considera que este tema no debería estar contemplado en el Código Penal, ya que, según él, si una mujer se casa con un hombre, no tiene derecho a negarse a tener relaciones sexuales con él.

Cedeño ejemplifica su postura con situaciones hipotéticas, como si un hombre casado con sida decidiera quitar el condón durante el acto sexual para infectar a su esposa, comparando esta acción con la decisión de quitar el condón para embarazar a la mujer aún en contra de su voluntad. Considera que estos temas no deberían ser regulados por la ley, sino que son aspectos que corresponden a la intimidad de la pareja.

Las declaraciones del diputado han generado indignación en la sociedad dominicana, con comentarios que critican su postura y cuestionan su papel como legislador. Se ha señalado que este tipo de mentalidad contribuye a la violencia de género y los feminicidios en el país, al considerar a la mujer como propiedad del hombre y negarle su autonomía y derechos.

El debate sobre la inclusión de este tipo de situaciones en el Código Penal ha reavivado la discusión sobre la protección de los derechos de las mujeres en la República Dominicana. Organizaciones y activistas han expresado su rechazo a las declaraciones de Cedeño y han instado a que se promueva la igualdad de género y se proteja la integridad de las mujeres ante situaciones de violencia y abuso.

En medio de la controversia, el diputado ha mantenido su postura, argumentando que las situaciones planteadas son parte de la vida íntima de las parejas y no deben ser reguladas por la ley. Sin embargo, sus declaraciones han despertado un debate público sobre la importancia de garantizar el respeto y la dignidad de todas las personas, independientemente de su género.

La sociedad dominicana se encuentra dividida ante las declaraciones de Eugenio Cedeño, con posturas encontradas sobre la necesidad de regular situaciones como las planteadas por el diputado en el Código Penal. Mientras algunos consideran que es fundamental proteger los derechos de las mujeres y prevenir situaciones de abuso, otros defienden la libertad individual y la intimidad de las parejas como argumento para no intervenir desde el ámbito legal en aspectos relacionados con las relaciones sexuales.

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