En Villa Mella, la pequeña Kylie Naomi Rosa, de 9 años, fue asesinada mientras intentaban robarle. El puente Francisco J. Peinado se convirtió en un lugar de homenaje y dolor, decorado con globos y rosas blancas y rosadas. A una semana de su trágica muerte, Kylie cumpliría 10 años. Su madre, Kerlin Alcántara Jorge, quiso conmemorar su cumpleaños en el lugar donde perdió la vida para concienciar sobre la violencia en la sociedad dominicana.

En medio de la tristeza de las decenas de personas que se acercaron al lugar, Kerlin Alcántara Jorge hizo un llamado a luchar por la seguridad en la República Dominicana. Pidió que se haga justicia por su hija, señalando que el culpable, siendo menor de edad, debería ser juzgado como adulto debido a la gravedad de sus acciones. Además, hizo hincapié en la importancia de creer en la justicia divina y en un Dios que cuida de su hija fallecida.

La madre de Kylie expresó su resignación ante la pérdida de su hija, asegurando que ahora descansa en paz junto a Dios y su abuela, quien también perdió la vida en un asalto unos días después. Pidió que no haya más lágrimas por la inocencia arrebatada y destacó que su hija vino al mundo para hacer un cambio positivo. Durante la ceremonia de conmemoración se repartieron juguetes a los niños presentes y se compartieron golosinas como en cualquier cumpleaños.

La Oficina de Atención Permanente del Distrito Nacional dictó tres meses de prisión preventiva para tres de los cuatro implicados en el asesinato de Kylie Rosa. Los acusados fueron enviados a diferentes centros penitenciarios para cumplir la medida de coerción. En el caso de uno de los implicados, que alega ser menor de edad, su expediente será remitido al tribunal correspondiente. La justicia busca esclarecer el terrible crimen que conmocionó a la sociedad dominicana.

Kerlin Alcántara Jorge hizo un llamado a la sociedad dominicana a unirse en la lucha por la seguridad y la justicia, recordando la trágica pérdida de su hija Kylie Naomi Rosa. Durante el homenaje realizado en el puente donde la niña perdió la vida, se destacó la importancia de recordar a las víctimas de la violencia y trabajar juntos para crear un entorno más seguro y justo para todos los ciudadanos. La memoria de Kylie sigue viva, inspirando a su madre y a la comunidad a demandar cambios significativos.

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