El dominicano Cristian Manuel Ruiz Decena vivió una odisea para salir de Haití, donde estuvo desde diciembre de 2023 hasta julio de 2024. Fue contratado por una empresa haitiana para trabajar como mecánico en Carrefour, enfrentando peligros por la presencia de bandas armadas, especialmente la liderada por Barbecue. Durante su estadía, no podía salir de su casa al trabajo sin seguridad y pagando por servicios básicos como ir al supermercado debido a la falta de electricidad en el país.
Después de siete meses en un lugar peligroso, Ruiz Decena finalmente pudo regresar a la República Dominicana. En su travesía de regreso, tuvo que dejar su vehículo en Carrefour y abordar una lancha hasta el Aeropuerto Internacional Toussaint Louverture. Pagó 500 dólares por el viaje en lancha y otros 500 a un acompañante de seguridad. Desde Toussaint Louverture, se trasladó al aeropuerto regional Guy Malary de Puerto Príncipe y luego a Cabo Haitiano, desde donde cruzó la frontera por Dajabón para finalmente regresar a su país.
Ruiz Decena advirtió que Haití no es un país seguro para viajar y recomendó a las personas que tomen precauciones si deciden visitarlo por razones personales o de trabajo. El Ministerio de Relaciones Exteriores de la República Dominicana ha exhortado a los ciudadanos a abstenerse de viajar a Haití desde octubre de 2021, debido al aumento de la violencia y el control de bandas armadas dedicadas a cometer crímenes atroces como violaciones y secuestros para obtener recursos.
Durante su tiempo en Haití, Ruiz Decena se vio obligado a vivir en constante alerta y con medidas de seguridad extremas debido a la situación de inseguridad en el país. Tuvo que pagar por servicios esenciales como la seguridad, transporte y hasta la visita al supermercado. Su regreso a la República Dominicana estuvo marcado por varios obstáculos y desafíos, como tener que abandonar su vehículo y realizar un complejo trayecto que incluyó diversas formas de transporte.
A pesar de todos los peligros y dificultades que enfrentó, Ruiz Decena logró regresar a su país de origen gracias a la oportunidad que se presentó con la llegada de la policía keniana. Su experiencia en Haití le dejó claro que no es un lugar recomendado para viajar, especialmente dadas las condiciones de inseguridad que se viven en el país. Su historia sirve como advertencia para aquellos que consideren visitar Haití, recordándoles la importancia de la precaución y la seguridad en este tipo de situaciones.
