El presidente Luis Abinader reconoció la presencia de actos de corrupción en la frontera como un tema pendiente de su gobierno, especialmente con el incremento de la crisis en Haití. A pesar de los avances en la lucha contra la corrupción a todos los niveles, el mandatario admitió que las operaciones de la Dirección General de Migración podrían haberse multiplicado por diez debido a la situación especial en Haití. Aunque se han realizado algunos procesamientos por corrupción, Abinader reconoció que es un tema pendiente que deben seguir abordando, especialmente en un área tan sensible como las fronteras.
Además, Abinader habló sobre la posible ayuda de República Dominicana ante la llegada de una fuerza multinacional a Haití que enfrentaría a las bandas armadas del país en coordinación con la Policía Haitiana. El presidente reafirmó que el Gobierno dominicano no prestaría ayuda adicional a la misión multinacional en términos militares, solo en temas de ayuda humanitaria, especialmente en servicios de salud. Abinader dejó en claro que República Dominicana no colaboraría en asuntos militares, únicamente en aquellos relacionados con la ayuda humanitaria, como la disposición de hospitales para brindar servicios médicos.
En cuanto a la posibilidad de que República Dominicana sea un punto logístico de entrada de ayuda para Haití por parte de otros países, el presidente dejó en claro que solo se prestaría ayuda humanitaria en términos de servicios de salud. Aunque en el pasado el país actuó como punto de entrada para la ayuda tras el terremoto de 2010, Abinader enfatizó que actualmente la colaboración se limita a aspectos humanitarios y no militares. Esta postura refleja la disposición del gobierno de República Dominicana a colaborar en la crisis en Haití, pero de forma limitada y enfocada en servicios médicos.
Abinader también destacó la importancia de seguir avanzando en la lucha contra la corrupción, especialmente en las fronteras, que son áreas muy sensibles. A pesar de los esfuerzos ya realizados, el presidente reconoció que se trata de un tema pendiente que requiere atención continua. Con la crisis en Haití exacerbando la problemática, es fundamental mantenerse en vigilancia y tomar medidas eficaces para combatir la corrupción en todos los niveles, asegurando la transparencia y la integridad en las operaciones en la frontera.
En resumen, el presidente Abinader reconoció los desafíos en materia de corrupción en la frontera, especialmente con la crisis en Haití, y reafirmó la disposición de República Dominicana a prestar ayuda humanitaria en temas de salud, pero no colaborar en asuntos militares. Es fundamental seguir avanzando en la lucha contra la corrupción en las fronteras y mantener un enfoque en la transparencia y la integridad en todas las operaciones. Con una postura clara sobre el tipo de ayuda que se brindará a Haití y un compromiso continuo con la lucha contra la corrupción, el gobierno de Abinader busca abordar los desafíos actuales de manera efectiva y responsable.