Vendedores de plátanos del mercado fronterizo en Dajabón, República Dominicana, están pidiendo al gobierno dominicano que levante la prohibición de exportar plátanos a Haití. Según los vendedores, los plátanos vendidos en el mercado de la frontera son de tercera calidad y son principalmente consumidos por haitianos debido a sus preferencias específicas de calidad. Informan que por orden del Ministro de Agricultura, Limbert Cruz, los soldados en la frontera están confiscando grandes cantidades de productos agrícolas comprados por extranjeros. Los vendedores afirman que han estado enfrentando este problema durante varios meses y que, aunque hubo un período de escasez, ahora hay sobreproducción, lo que ha causado saturación en el mercado. Describen la prohibición de exportación como excesiva, enfatizando que vender estos plátanos es su principal medio de sustento y es esencial para apoyar a sus familias y cumplir con sus compromisos personales.
Los vendedores también destacan que la venta de plátanos a Haití es una tradición arraigada en la zona que ha existido durante décadas, y que la prohibición de exportación está teniendo un impacto negativo en la economía local. Señalan que muchos pequeños productores de plátanos se han visto afectados por esta medida, ya que dependen en gran medida de la venta de sus productos en el mercado fronterizo. Además, resaltan que la situación se ha vuelto más complicada debido a la pandemia de COVID-19, que ha afectado gravemente la economía de la región y ha dificultado aún más la subsistencia de los vendedores.
Los vendedores también expresaron su preocupación por el hecho de que la prohibición de exportar plátanos a Haití está generando un impacto social negativo en la comunidad, ya que muchas familias dependen directa o indirectamente de la venta de plátanos en el mercado de la frontera. Algunos vendedores mencionaron que la situación se ha vuelto insostenible para ellos, ya que no pueden vender sus productos y no tienen otra fuente de ingresos. Además, señalaron que la situación ha provocado tensiones y conflictos en la zona, ya que los vendedores se sienten frustrados y preocupados por su futuro y por el bienestar de sus familias.
En respuesta a la petición de los vendedores, el gobierno dominicano ha anunciado que está revisando la prohibición de exportar plátanos a Haití y está evaluando la posibilidad de levantarla. El Ministerio de Agricultura ha declarado que se está llevando a cabo un análisis de la situación para determinar si es posible permitir nuevamente la exportación de plátanos a Haití y ha señalado que se realizarán consultas con los diferentes actores involucrados en la cadena de producción y comercialización de plátanos en la región.
La comunidad internacional también ha expresado su preocupación por la situación, instando a las autoridades dominicanas a encontrar una solución que permita a los vendedores de plátanos en la frontera continuar con su actividad comercial de manera sostenible. Algunas organizaciones han propuesto medidas de apoyo económico y asistencia técnica para los vendedores afectados por la prohibición de exportación, con el objetivo de ayudarles a superar esta difícil situación y garantizar su sustento y el de sus familias.
En resumen, los vendedores de plátanos en el mercado fronterizo de Dajabón están enfrentando dificultades debido a la prohibición de exportar plátanos a Haití impuesta por el gobierno dominicano. Esta medida ha tenido un impacto negativo en la economía local, en la subsistencia de los vendedores y en la estabilidad social de la comunidad. Sin embargo, el gobierno está evaluando la posibilidad de levantar la prohibición, y la comunidad internacional está brindando su apoyo para encontrar una solución sostenible para los vendedores afectados.