Una nueva caravana de alrededor de 1,000 migrantes partió desde Tapachula, Chiapas, en la frontera sur de México, con destino a Ciudad de México. Esta caravana fue denominada ‘Dios nos Guía’ y está conformada en su mayoría por personas provenientes de países como Venezuela, Colombia, Ecuador, Perú, Centroamérica, Haití, Argentina, Panamá, Costa Rica, Afganistán y Nepal, entre otros. Los motivos que impulsan a estos migrantes a emprender este viaje son la demora en las citas de ‘CBP One’, la falta de empleo, la difícil situación económica, la inseguridad y la violencia en sus países de origen.

Uno de los migrantes presentes en la caravana es Álvaro Batista, quien es originario de Colombia. Él ha enfrentado múltiples obstáculos para llegar a la frontera sur y se ha sumado a este contingente con la esperanza de cruzar México y llegar a la frontera con Estados Unidos. Batista afirmó que la caravana no está realizando nada ilegal y solicitó apoyo a la Guardia Nacional para facilitarles el camino y brindarles protección, especialmente a las mujeres y niños que viajan en el grupo.

Jeison, un migrante venezolano, también hizo un llamado de atención al sector salud, mencionando que en la caravana viajan muchas mujeres y niños que se encuentran en una situación precaria en sus países de origen. El objetivo de llegar a Ciudad de México es esperar la cita de ‘CBP One’ y buscar una mejor calidad de vida para ellos y sus familias. Esta es la segunda caravana que parte de la región de Tapachula hacia la capital mexicana, con la intención de solicitar al gobierno empleo, seguridad y una estancia digna durante su tránsito por el país.

El grupo de migrantes es acompañado por elementos de tránsito estatal y policías municipales, quienes se encargan de mantener el orden en la caravana y prevenir posibles accidentes en la carretera federal. Uno de los motivos por los que han decidido salir de sus países es la falta de alimentos, ya que hay menores que apenas reciben una tostada al día para subsistir. Además, solicitan apoyo humanitario al gobierno de México, ya que la ciudad de Tapachula se está viendo saturada por la presencia de migrantes que no cuentan con recursos económicos.

A pesar de la disminución en la detención diaria de migrantes en la frontera de Estados Unidos con México, la migración irregular ha aumentado significativamente en el país. Según datos de la Unidad de Política Migratoria, la migración irregular se elevó un 193% interanual en la primera mitad del año, superando las 712,000 personas. Ante esta situación, los migrantes que participan en la caravana ‘Dios nos Guía’ buscan visibilizar sus necesidades y solicitar apoyo al gobierno mexicano para lograr una mejor calidad de vida y oportunidades en sus destinos finales.

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