El expresidente Donald Trump ha logrado acortar la ventaja que tenía su rival demócrata Kamala Harris en las encuestas a solo 16 días de las elecciones presidenciales del 5 de noviembre en Estados Unidos. Según el portal FiveThirtyEight, Trump tiene una ligera ventaja sobre Harris y un 52% de posibilidades de ganar los comicios. A pesar de que Harris lidera la intención de voto a nivel nacional, Trump resulta más favorecido por el Colegio Electoral, lo que hace que las elecciones se pronostiquen como las más ajustadas del último siglo en el país.

La situación actual es tan ajustada que la diferencia entre Harris y Trump es de menos de dos puntos porcentuales en siete estados decisivos y a nivel nacional la vicepresidenta solo le saca dos puntos de ventaja al exmandatario. Esto significa que un pequeño error estadístico podría alterar el resultado de las elecciones. En caso de que Trump resultara ganador, sería una victoria histórica que recordaría a la elección de Rutherford Hayes sobre Samuel Tilden en 1876 por un solo voto electoral.

En un escenario tan ajustado, cada voto cuenta y los dos candidatos están intensificando su presencia en los estados clave donde ya ha comenzado el voto anticipado con una elevada participación. La retórica y el fuego cruzado entre ambos también se ha intensificado con ataques e insultos. Trump sugirió la posibilidad de desplegar a los militares en contra de los "enemigos internos" de Estados Unidos, mientras que Harris calificó a su rival de "fascista" y "desquiciado".

Ambos candidatos han redoblado sus esfuerzos de campaña en los estados decisivos como Arizona, Georgia, Míchigan, Nevada, Carolina del Norte, Pensilvania y Wisconsin. Trump se encuentra en Pensilvania, donde se espera que visite un McDonald’s y acuse a Harris de haber inventado que trabajó en esa cadena de comida rápida cuando era joven. Por su parte, Harris, que cumple 60 años, se encuentra en Georgia antes de viajar a Pensilvania, donde hará campaña con Liz Cheney, excongresista republicana enfrentada a Trump.

En las últimas semanas, Trump ha logrado ganar terreno en las encuestas y acortar la ventaja de Harris, lo que ha convertido las elecciones presidenciales del 5 de noviembre en las más ajustadas del último siglo en Estados Unidos. A pesar de que la demócrata lidera la intención de voto a nivel nacional, Trump resulta más favorecido por el Colegio Electoral, lo que le otorga una ligera ventaja en las probabilidades de ganar los comicios. La diferencia entre ambos candidatos es mínima, lo que hace que cada voto cuente y que la presencia en los estados clave sea crucial para definir al próximo presidente del país.

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