En una intervención telefónica en Fox News, Donald Trump acusó al Partido Demócrata de llevar a cabo un "golpe de Estado" en contra del actual presidente Joe Biden, quien decidió no presentarse a la reelección por presiones internas de su partido. Trump criticó fuertemente el discurso de Biden en el que explicaba su decisión, calificándolo como "terrible" y asegurando que los demócratas no querían que se presentara a las elecciones debido a su baja popularidad en las encuestas.
El expresidente estadounidense señaló a Barack Obama, Nancy Pelosi y otros líderes demócratas de estar detrás de un complot para forzar la retirada de Biden, especialmente después de su desempeño en el debate electoral con Trump el mes pasado. Trump afirmó que los demócratas fueron a ver a Biden para expresarle que no podría ganar las elecciones, lo cual él considera como cierto. Además, el republicano criticó el aspecto y la voz de Biden durante su discurso, considerándolo en su totalidad como un fracaso.
Biden, recién recuperado de la covid-19, dio un discurso en el que explicó que tomó la decisión de apartarse de la carrera electoral para "salvar" la democracia y pasar el testigo a una nueva generación que pueda unir a Estados Unidos. Trump no tardó en responder a las declaraciones de Biden, calificando su discurso como terrible y criticando todos los aspectos de su presentación. Además, el republicano arremetió contra la vicepresidenta Kamala Harris, a quien describió como una "izquierdista radical no muy inteligente".
La posible candidatura de Kamala Harris preocupa a los republicanos, ya que algunos sondeos y análisis preliminares sugieren que la vicepresidenta podría tener un mejor desempeño electoral que Biden y podría derrotar a Trump en algunos estados clave. Este escenario supondría un desafío para la campaña de Trump, quien se está preparando para buscar su reelección en las próximas elecciones. Harris ha ganado relevancia en el Partido Demócrata y se perfila como una figura importante en la política estadounidense.
La división entre los partidos políticos en Estados Unidos parece estar en su punto más álgido, con acusaciones de golpe de Estado y conspiraciones por parte de ambas partes. Trump sigue mostrando su rechazo hacia Biden y los demócratas, mientras que estos últimos buscan unirse en torno a una nueva figura como Kamala Harris para enfrentar al presidente republicano en las elecciones. La incertidumbre política en el país es evidente y el resultado de las próximas elecciones presidenciales será crucial para el futuro de Estados Unidos.