Los responsables del recinto de conciertos WiZink Center en Madrid amonestaron al rapero estadounidense Travis Scott por exceder los límites de sonido durante sus conciertos en la capital española. A pesar del éxito de sus actuaciones, se vieron empañadas por su incumplimiento de las normas de emisión de sonido del recinto. Después de su primer concierto, se le advirtió que tomarían medidas si no atendía las limitaciones, y finalmente decidieron amonestarlo.
Después del primer concierto, se trasladó a los responsables de la gira mundial de Travis Scott la gravedad de su incumplimiento en materia medioambiental y las posibles molestias que podría ocasionar a los vecinos cercanos. Se les informó de que en el segundo concierto se levantaría un acta notarial con medidas de sonido realizadas por una empresa independiente de ingeniería acústica ante un posible incumplimiento para tomar medidas correspondientes.
Los responsables del WiZink Center lamentaron que un artista como Travis Scott no cumpla con las normas medioambientales de las ciudades que visita, ofreciendo una imagen de irresponsabilidad en el mundo de la música que podría perjudicar al sector. Por contrato, el recinto tiene establecido un máximo de emisión de sonido de 102 dB en las bandas hasta los 100 Hz y un máximo de 105 dBA, límites que Scott superó alcanzando los 120 dB en los subgraves.
Durante los conciertos, con casi 17.000 fans llenando el WiZink Center, las medidas drásticas podrían haber desencadenado un efecto de seguridad imprevisible. Actualmente, el recinto cuenta con sistemas de sonometría para controlar el sonido exterior y poder actuar en consecuencia. La amonestación a Travis Scott implicará que, antes de futuras actuaciones en el recinto madrileño, deberá asumir garantías de cumplimiento de las normas internas.
La amonestación al rapero también busca ser una llamada de atención al sector musical para que los conciertos, festivales u otras actuaciones musicales respeten el entorno y minimicen su impacto en el vecindario. Se busca promover un comportamiento respetuoso con el medio ambiente y las normas establecidas para garantizar un ambiente seguro y agradable para todos los asistentes a eventos musicales en Madrid y en cualquier ciudad.