La organización Transparencia Electoral acusó a cien invitados internacionales, incluyendo al expresidente dominicano Leonel Fernández, de viajar a Venezuela con la finalidad de "legitimar el fraude electoral". Indicó que el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, utilizó una táctica de regímenes antidemocráticos al convocar a militantes de partidos afines al PSUV a actividades faltando pocos días de las elecciones para luego convertirlos en supuestos observadores. Según la entidad, con la presencia de estos observadores internacionales, Maduro buscó dar legitimidad a unos comicios considerados fraudulentos y calificó a estos observadores de "falsos". Destacaron que los participantes se mostraron activos en redes sociales asegurando que el proceso cumplía con estándares democráticos, aunque muchos no ocultaban su apoyo a Maduro.
Transparencia Electoral mencionó que muchos de los invitados internacionales participaron en un encuentro organizado por la ALBA-TCP antes de pasar a ser observadores electorales. En esta lista destacaban figuras como Leonel Fernández, Ernesto Samper y miembros de partidos de izquierda de varios países. Señalaron que estos "militantes" se mostraron activos en redes sociales defendiendo la legitimidad de las elecciones, a pesar de las irregularidades del proceso. La organización instó a los países democráticos a no acreditar a estos falsos observadores y a implementar filtros de selección y códigos de conducta estrictos para quienes pretendan ejercer la labor de observación electoral.
La crisis postelectoral en Venezuela se desató luego de las elecciones presidenciales del 28 de julio, donde el CNE proclamó ganador a Nicolás Maduro sin presentar actas electorales que respalden su victoria. La oposición presentó actas que mostraban a Edmundo González Urrutia como ganador con el 67 % de los votos, frente al 30 % de Maduro. A pesar de la presentación de estas actas, el CNE no ha mostrado las controvertidas actas tras 22 días de las elecciones. Esta situación ha contribuido a una prolongación del conflicto en Venezuela, con balance de al menos 24 muertes y más de mil detenidos.
Transparencia Electoral afirma que la labor de los falsos observadores ha contribuido a la prolongación del conflicto en Venezuela, impidiendo una transición hacia la democracia. Instó a los países democráticos a no acreditar a estos falsos observadores y a establecer filtros de selección y códigos de conducta estrictos para quienes pretendan ejercer la labor de observación electoral. La organización se dedica a promover los valores democráticos y fomentar elecciones bajo estándares de integridad reconocidos internacionalmente, desarrollando acciones para visibilizar amenazas al sistema democrático y capacitar a funcionarios electorales, partidos políticos y organizaciones de la sociedad civil en buenas prácticas electorales.
En resumen, Transparencia Electoral acusó a cien invitados internacionales, incluyendo a Leonel Fernández, de viajar a Venezuela para "legitimar el fraude electoral" de las elecciones presidenciales de julio. Señaló que estos observadores internacionales buscaban dar legitimidad a unos comicios considerados fraudulentos y los calificó de "falsos observadores". Destacaron que los participantes se mostraron activos en redes sociales defendiendo la legitimidad de las elecciones, a pesar de las irregularidades del proceso. La organización instó a no acreditar a estos falsos observadores y a implementar filtros de selección y códigos de conducta estrictos para quienes pretendan ejercer labores de observación electoral.
