Tesla ha llamado a revisión casi 1.9 millones de vehículos en Estados Unidos debido a un defecto en su software que no permite detectar si el pestillo del capó está cerrado. La Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en la Carretera de EE.UU. (NHTSA) ha confirmado que la llamada a revisión afecta a varios modelos de vehículos de Tesla, y que la compañía está solucionando el problema con una actualización remota del software.
La NHTSA ha señalado que los propietarios de los vehículos afectados recibirán notificaciones por carta a partir del 22 de septiembre. El defecto en cuestión puede hacer que el pestillo del capó se abra sin intención mientras el vehículo está en movimiento, lo que puede bloquear la visión del conductor y aumentar el riesgo de accidentes. Tesla ha afirmado que no tiene conocimiento de ningún accidente o lesión causada por este defecto.
La investigación del defecto comenzó el pasado 25 de marzo, luego de que varios propietarios en China reportaran la apertura no intencionada del capó de sus vehículos. Tesla descubrió que el problema era causado por la deformación del interruptor del pestillo y comenzó a enviar actualizaciones del software de forma remota en junio para remediar el defecto y detectar si el pestillo del capó está cerrado.
La actualización del software es fundamental para corregir este problema y garantizar la seguridad de los conductores y pasajeros de los vehículos afectados. Esta llamada a revisión es un ejemplo de cómo la tecnología puede utilizarse para solucionar problemas de seguridad de manera rápida y eficiente, evitando potenciales accidentes y lesiones.
Tesla ha demostrado su compromiso con la seguridad y bienestar de sus clientes al tomar medidas inmediatas para resolver este problema. Los propietarios de los vehículos afectados deben seguir las instrucciones proporcionadas por la compañía para garantizar que el software se actualice correctamente y que el pestillo del capó funcione correctamente en todo momento.
Esta llamada a revisión de casi 1.9 millones de vehículos en Estados Unidos es un recordatorio de la importancia de mantener los vehículos en condiciones óptimas y de la responsabilidad de los fabricantes de automóviles de abordar rápidamente cualquier problema de seguridad que pueda surgir. Tesla ha reafirmado su compromiso con la seguridad y la excelencia en la ingeniería, y continuará trabajando para garantizar que sus vehículos cumplan con los más altos estándares de calidad y seguridad.
