El Consejo Nacional de la Empresa Privada (CONEP) en Santo Domingo está pidiendo al Congreso Nacional que continúe con el diálogo iniciado en el Ministerio de Hacienda sobre la reforma fiscal. Consideran fundamental que se abra un foro para que los diversos sectores de la economía puedan expresar sus opiniones y preocupaciones sobre el tema. Reconocen la importancia de generar recursos adicionales para satisfacer las demandas de la población en términos de servicios e infraestructura, pero insisten en que este proceso debe basarse en el consenso y la escucha activa.

Mediante una nota de prensa, el CONEP enfatiza en la necesidad de avanzar hacia una reforma fiscal que favorezca la sostenibilidad del Estado y el crecimiento y la competitividad del sector privado. Se comprometen a promover un diálogo amplio y constructivo en torno al proyecto de Ley de Modernización Fiscal. Sin embargo, otras instituciones del sector económico han manifestado su descontento con la propuesta de reforma fiscal.

La Asociación de Industrias de Bebidas No Alcohólicas (ASIBENAS) ha pedido a las autoridades que reconsideren la propuesta fiscal, argumentando que tendría un grave impacto en los sectores más vulnerables de la población, especialmente por el impuesto al consumo para las bebidas no alcohólicas con azúcar añadida. Por otro lado, la Asociación Dominicana de Zonas Francas (ADOZONA) también ha expresado su preocupación por el gravamen sobre las operaciones de los parques de zonas francas, ya que consideran que restaría competitividad frente a otros países de la región DR-CAFTA.

En este contexto de desacuerdos y preocupaciones, distintas instituciones y sectores económicos en Santo Domingo buscan que el diálogo sobre la reforma fiscal sea amplio, inclusivo y tenga en cuenta las diversas perspectivas y necesidades de la sociedad. Es importante encontrar un equilibrio entre la generación de recursos para el Estado y la protección de los sectores más vulnerables, así como garantizar la competitividad y el crecimiento del sector privado en un contexto regional y global.

El proceso de diálogo y consenso en torno a la reforma fiscal en Santo Domingo se presenta como un desafío en el que distintos actores deben trabajar juntos para encontrar soluciones que sean justas y equitativas para todos los sectores de la economía. La participación activa, la escucha atenta y la búsqueda de acuerdos serán clave para avanzar hacia una reforma fiscal que beneficie a la sociedad en su conjunto, garantizando la sostenibilidad fiscal del Estado y promoviendo el crecimiento y la competitividad económica en el país.

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