En julio, la República Dominicana recibió más de $921 millones en remesas, con el Gran Santo Domingo y la provincia de Santiago representando el 58.5% del total. Datos del Banco Central revelan que el Distrito Nacional recibió el 38.1% de las remesas, seguido por Santiago con el 12.1% y Santo Domingo con el 8.4%. La región Norte recibió el 12.9%, mientras que la región Este recibió el 7.2%. La región Sur tuvo la menor participación, con solo el 6.2% del total de las remesas. El Banco Central proyecta que para fin de año, las remesas alcanzarán aproximadamente los $10,500 millones, la inversión extranjera directa (IED) superará los $4,500 millones y los ingresos por turismo sobrepasarán los $10,600 millones.
Estos flujos de divisas extranjeras han contribuido a la relativa estabilidad del tipo de cambio, con la moneda nacional depreciándose un 2.1% a finales de julio de 2024 en comparación con finales de 2023. El aumento de los ingresos externos también ha ayudado a mantener un nivel saludable de reservas internacionales, que alcanzaron los $15.3 mil millones a finales de julio. Esta cantidad cubre alrededor de 5.8 meses de importaciones y equivale al 12.3% del PIB, superando los umbrales recomendados por el FMI.
La economía dominicana ha experimentado un crecimiento en las remesas, la inversión extranjera directa y los ingresos por turismo, lo que ha contribuido a la estabilidad y fortaleza de la economía del país. Se espera que estos patrones continúen hasta el final del año, con proyecciones optimistas en todas estas áreas clave. Esto ha sido fundamental para mantener un tipo de cambio estable y unas reservas internacionales sólidas.
El crecimiento económico del país ha sido impulsado en gran parte por estos flujos de ingresos externos, lo que ha permitido al gobierno mantener una situación económica saludable. Las remesas, la inversión extranjera directa y los ingresos por turismo han sido pilares fundamentales en la economía dominicana, proporcionando estabilidad y crecimiento. El Banco Central ha proyectado cifras positivas para el cierre del año en estas áreas, lo que refleja un panorama económico alentador.
En general, la República Dominicana ha mantenido una situación económica favorable, con un aumento en las remesas, la inversión extranjera directa y los ingresos por turismo. Estos flujos de ingresos han contribuido a la estabilidad del tipo de cambio y las reservas internacionales del país, proporcionando una base sólida para el crecimiento económico continuo. Con proyecciones positivas para el cierre del año, se espera que estos ingresos externos sigan siendo un impulso clave para la economía dominicana.