Con los recientes asaltos a dos entidades financieras en República Dominicana, los dominicanos recuerdan dos atracos bancarios ocurridos en el año 2015 en un lapso de tiempo similar. El lunes, la sucursal del Banco Popular en el Distrito Nacional fue víctima de un atraco realizado por cuatro asaltantes, quienes entraron a la sucursal y huyeron en dos minutos y ocho segundos con una cantidad aún indeterminada de dinero. Los ladrones llegaron en una yipeta negra y se llevaron el botín rápidamente, abordando el vehículo mientras este estaba en marcha.
Diez días antes, la sucursal del Banco de Reservas en Santiago fue asaltada, donde resultaron heridas tres personas. Siete personas fueron identificadas como responsables del robo, siendo seis dominicanos y un haitiano. Seis de los implicados están bajo custodia, mientras que un séptimo ha permanecido prófugo. Los cabecillas de la banda habían sido condenados anteriormente por robo a mano armada a otra entidad financiera en 2013, pero solo cumplieron dos años de su condena.
En otro caso de asalto bancario, el Banco del Progreso fue robado en 2015 por cuatro hombres armados, quienes se llevaron una cantidad considerable de dinero. Dos de los implicados fueron condenados a 20 años de prisión cada uno, mientras que otros dos recibieron condenas de 10 años. El asalto fue registrado por las cámaras de seguridad del banco y llevó a la captura de los delincuentes.
La historia se repitió siete días después, cuando otra sucursal del Banco Popular fue asaltada, resultando en la muerte del agente de seguridad que trabajaba en el lugar. Los asaltantes realizaron disparos y se llevaron una suma significativa de dinero en efectivo. Uno de los involucrados fue condenado a 20 años de prisión, mientras que otros dos quedaron como prófugos. La Policía Nacional logró dar muerte a uno de los delincuentes un mes después del atraco.
Estos asaltos bancarios han generado alarma en la población dominicana y han puesto de manifiesto la necesidad de reforzar la seguridad en las entidades financieras. La rápida actuación de las autoridades para capturar a los responsables demuestra el compromiso con la protección de los ciudadanos y sus bienes. Es fundamental seguir investigando estos casos para evitar que se repitan en el futuro y garantizar la tranquilidad de la población en el país.
