República Dominicana se ha consolidado como un destino importante para la inversión extranjera en el sector energético, gracias a su compromiso con la diversificación de fuentes y su potencial de crecimiento sostenible. El director ejecutivo de la Comisión Nacional de Energía, Edward Veras, destacó el sólido crecimiento económico del país, su alta demanda energética y las oportunidades para invertir en infraestructura y proyectos energéticos.
El país ha experimentado un aumento en el desarrollo de fuentes renovables, apoyado por incentivos fiscales desde 2007 y un incremento significativo en energías limpias en la última década. A pesar de desafíos como la falta de interconexión eléctrica con países vecinos, República Dominicana ha potenciado recursos naturales como la energía solar y eólica, convirtiéndose en un lugar idóneo para la generación de energía.
Con objetivos claros, el país se ha propuesto alcanzar el 21% de energía renovable para finales de 2024, con la meta de llegar al 25% para 2025 y al 30% para 2030. Además, se ha centrado en la integración de sistemas de almacenamiento de energía para mitigar la variabilidad de fuentes renovables. La estabilidad económica y el apoyo gubernamental a políticas favorables al sector energético han posicionado a República Dominicana como un destino atractivo para la inversión extranjera en energías renovables.
Con la implementación de un régimen económico que atrae inversiones en energías renovables mediante precios de referencia en el mercado, el país ha logrado tener proyectos renovables en el mercado spot con éxito, sin la necesidad de contratos previos. Se han establecido contratos de corto, mediano y largo plazo con usuarios no regulados del sector privado y distribuidoras, además de la firma de 38 contratos directos con proponentes de energía renovable el año pasado.
El Plan Energético Nacional ha sido fundamental para analizar inversiones y garantizar una transición energética exitosa. Con actualizaciones recientes y futuras versiones, este plan permite trabajar en reformas sectoriales, nuevas regulaciones y leyes que fomenten la eficiencia energética y el ordenamiento territorial, aspectos cruciales para el desarrollo sostenible de las energías renovables en el país. Los precios actuales de los contratos oscilan entre siete y nueve centavos.
Entre los retos a enfrentar se encuentran seguir avanzando en la reforma del sector energético, promover leyes que impulsen la eficiencia energética y abordar el ordenamiento territorial como un factor clave para la planificación y ejecución de proyectos públicos y privados. Con un enfoque claro en la planificación, la inversión en infraestructura y el compromiso con las energías renovables, República Dominicana se consolida como un actor clave en el panorama energético internacional.
