En Nueva York, un sexto funcionario de la Administración del alcalde Eric Adams renunció a su puesto en medio de una investigación federal a varios empleados del Ayuntamiento y a la acusación contra el propio alcalde por soborno y otros cargos. El último en sumarse a la lista de dimisiones fue el vicealcalde de Seguridad, Philip Banks III, hermano del canciller de Educación, David Banks, quien también dimitió y dejará su puesto la semana próxima. A pesar de las renuncias, el alcalde Adams se mantiene firme en que no renunciará y ha asegurado que podrá seguir dirigiendo la ciudad mientras se defiende de los cargos en su contra.

Según el alcalde, hace seis meses Philip Banks expresó su deseo de dejar el cargo para dedicarse a otras cosas en su vida, aunque él le pidió esperar un tiempo más. La próxima en dejar su puesto sería la vicealcaldesa Sheena Wright, esposa de David Banks, aunque Adams ha calificado estos rumores y ha dicho que informará si ocurre alguna dimisión. Recientemente, los federales confiscaron los teléfonos de Phil Banks, así como los de sus hermanos David y Terence (quien no trabaja en el Ayuntamiento) y el de la vicealcaldesa Wright. Los hermanos Banks afirman no haber hecho nada indebido, a pesar de las investigaciones en curso.

Otros funcionarios que renunciaron este año incluyen al jefe de la Policía y primer latino en el cargo, Edward Cabán, y a Timothy Pearson, uno de los colaboradores cercanos al alcalde. Ambos también enfrentan investigaciones y sus celulares fueron confiscados, aunque las razones exactas aún no se conocen. La gobernadora del Estado, Kathy Hochul, con el poder de despedir a Adams, aún no ha tomado esa decisión y ha señalado que está monitoreando la administración municipal y espera que se realicen más cambios.

A pesar de las renuncias y las investigaciones en curso, el alcalde Eric Adams continúa en su cargo y ha declarado su inocencia ante los cargos de soborno y fraude electrónico en sus tratos con el Gobierno turco para apoyar su campaña a la Alcaldía. Adams ha manifestado que anunciará cualquier cambio en la Administración cuando sea necesario y sigue trabajando en dirigir la ciudad de Nueva York a pesar de las acusaciones en su contra. La situación en la Administración municipal sigue siendo objeto de escrutinio, con la esperanza de que se realicen más cambios para garantizar la transparencia y la integridad en el gobierno de la ciudad.

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