Entre los años 2011 y 2016, la República Dominicana mantenía una proporción de divorcios por matrimonios de 41 por cada 100, con una variación mínima. Sin embargo, a partir del año 2017, hubo un aumento significativo en la tasa de divorcios en el país, que solo disminuyó durante la pandemia del coronavirus. Una vez que se produjo la reapertura económica y social, los divorcios volvieron a alcanzar niveles récord. En el año 2021, se registraron 63.35 divorcios por cada 100 matrimonios, casi duplicando los valores anteriores.

En el 2022, la incidencia de divorcios disminuyó ligeramente a 62.80, y en el 2023 descendió aún más a 55.10, representando la última cifra disponible sobre esta problemática. A pesar de estas cifras alentadoras, las rupturas de las uniones conyugales siguen siendo una preocupación en la República Dominicana. En el año 2023, se registraron 47,027 matrimonios y 25,914 divorcios, evidenciando una tendencia a la baja en las rupturas matrimoniales.

A pesar del aumento en los divorcios, las cifras de la Oficina Nacional de Estadísticas reflejan que cada vez más parejas optan por formalizar su unión a través del matrimonio, amparadas por las leyes del país. La tendencia general es al alza, destacando los años 2016 y 2019 como los de mayor número de matrimonios. Tras la reducción histórica debido a la pandemia, la República Dominicana está experimentando una recuperación en cuanto a la celebración de matrimonios.

Según los datos recopilados, los tres meses con mayor porcentaje de matrimonios son diciembre, enero y marzo, mientras que el mes preferido para los divorcios es marzo. Por otro lado, los tres meses con menor porcentaje de matrimonios son octubre, septiembre y noviembre, y para las rupturas es diciembre. En cuanto a la distribución porcentual por sexo, las mujeres tienden a contraer matrimonio a edades más tempranas que los hombres, aunque en edades más avanzadas, el porcentaje de hombres contrayentes supera al de las mujeres.

En la República Dominicana, la legislación reconoce dos tipos de matrimonios con los mismos efectos legales: el civil y el religioso. El 89.95% de las uniones fueron civiles, el 5.28% se clasificaron como canónicas ante la Iglesia católica, y el 4.78% restante fue catalogado como otros religiosos, celebrados ante autoridades de iglesias evangélicas. A pesar de los desafíos que enfrentan las parejas en el país, la tendencia a formalizar su unión a través del matrimonio sigue en aumento, demostrando la importancia que tiene esta institución en la sociedad dominicana.

Compartir.
Exit mobile version