Desde la reforma constitucional de 2010, un total de 70 leyes en República Dominicana siguen estancadas en el Congreso Nacional, sin haber sido adaptadas a la nueva normativa establecida. Estas leyes pendientes, denominadas "complementarias", incluyen aspectos fundamentales como la Ley de Compras y Contrataciones Públicas, el Código Penal, la reforma de la Ley de Seguridad Social, la Ley de Referendo, la Ley de Indulto, entre otras. A pesar de que algunas iniciativas han avanzado en el Congreso, todavía queda mucho trabajo por hacer para completar el proceso de adaptación.
Entre los proyectos de ley que esperan ser aprobados se encuentran la reforma a la Ley de Partidos Políticos, la reforma al Ministerio de Justicia, la Ley de Debates Electorales, la Ley de Vacuna, y la Ley de Fiscalización y Control del Congreso Nacional. También se espera la aprobación de reformas a la Ley de Trata, la Ley de Expresión y Libertad del Pensamiento, la Ley de Bomberos, la Ley de Regulación de Cooperativas, y la reforma a la Ley de los Municipios. A pesar de los avances en algunos aspectos, todavía existen muchas leyes importantes que requieren la atención y aprobación del Congreso.
En principio, la reforma constitucional de 2010 estableció la necesidad de adaptar un total de 222 leyes para garantizar los derechos expresados en la Constitución y mejorar la democracia y funcionalidad del Estado. A pesar de los esfuerzos realizados en el Congreso, todavía quedan muchas leyes por adaptar y aprobar. Entre las leyes que siguen pendientes se encuentran aquellas relacionadas con los derechos de participación ciudadana, el servicio civil obligatorio, la igualdad y la no discriminación, y los mecanismos de control social.
El exdiputado Henry Merán, encargado de Asuntos Legislativos de Fuerza del Pueblo, ha señalado en diversas ocasiones que a pesar de los avances logrados en el Congreso, todavía quedan muchas leyes por refrendar. Entre las leyes pendientes se encuentran aquellas relacionadas con el cambio climático, los derechos económicos y sociales de la población de bajos ingresos, la unión marital de hecho, la fiscalización y control del Congreso Nacional, la regulación de concesiones de honores y amnistías, y la racionalidad del gasto público. Estas leyes son fundamentales para fortalecer el marco legal y garantizar una mayor transparencia y eficiencia en la administración pública.
La adaptación de estas leyes pendientes a la nueva normativa constitucional es crucial para mejorar la calidad institucional y fortalecer la democracia en República Dominicana. La aprobación de estas leyes complementarias permitirá garantizar el respeto a los derechos ciudadanos, promover la igualdad y no discriminación, y establecer mecanismos de control y transparencia en la gestión pública. Es necesario que el Congreso Nacional priorice la aprobación de estas leyes y avance en el proceso de adaptación para lograr una mayor efectividad y legitimidad en el sistema legal del país.