Criadores de gallos de calidad en las provincias Espaillat y Santiago en la República Dominicana están preocupados por una serie de robos ocurridos en sus trampas en los últimos días. Funcionarios del Gobierno central, oficiales de la Policía Nacional y empresarios han sido víctimas de esta ola de robos que está afectando al sector. Entre los casos reportados se encuentra el hurto en la casa de la gobernadora de Espaillat, Juana Rosario de Candelier, donde los ladrones ingresaron por la parte trasera de la residencia, sorprendieron al personal de seguridad, los desarmaron y se llevaron al menos 30 ejemplares de gallos de pelea. Otro caso ocurrió en la gallería del empresario Arnulfo Gutiérrez en Gurabo, Santiago de los Caballeros, donde también fueron robadas aves de un oficial de la Policía Nacional en la misma zona. Otros criadores de gallos en San Víctor, La Playita, Monte Adentro y otros lugares de ambas provincias también han sido afectados por la delincuencia.
El profesor José Izquierdo, reconocido en la región norte del país por su participación en la crianza de gallos, lamenta que en la mayoría de los casos las autoridades no logran dar con los responsables de los robos. Muchas de las víctimas optan por no proceder legalmente debido a la dificultad de recuperar los ejemplares sustraídos. Izquierdo considera que los ladrones de gallos forman parte de bandas organizadas que operan con impunidad. Según el experto, es fácil identificar un gallo robado ya que los profesionales en el área llevan un registro de sus aves con placas de identificación. En sus palabras, cuando acuden a la Policía en busca de ayuda, a menudo se encuentran con pocas respuestas y un proceso burocrático que no les brinda soluciones concretas.
Los criadores de gallos de calidad en Espaillat y Santiago se encuentran preocupados por la delincuencia que azota sus trampas. Además de los casos reportados en la casa de la gobernadora de Espaillat y en la propiedad de un oficial de la Policía en Gurabo, otros criadores en diferentes zonas han sido afectados. Los robos de gallos se consideran parte de un patrón delictivo impulsado por bandas organizadas que operan con libertad en la región. A pesar de los esfuerzos de las autoridades locales y de la Policía Nacional, los afectados sienten que no se les brinda la protección necesaria y la resolución de los casos se dificulta debido a la falta de cooperación por parte de las autoridades.
Los criadores de gallos de pelea en Espaillat y Santiago señalan la importancia de mantener registros detallados de sus ejemplares para facilitar la identificación en casos de robo. José Izquierdo, referente en el sector, destaca que esta práctica es común entre los profesionales del gallerismo y permite actuar con mayor rapidez en caso de sustracción de aves. Sin embargo, la dificultad para recuperar los gallos robados y la falta de respuesta de las autoridades han llevado a muchos criadores a optar por no presentar denuncias formales. La impunidad con la que operan las bandas organizadas dedicadas al robo de gallos genera preocupación en la comunidad criadora, que busca soluciones efectivas para proteger su patrimonio y su trabajo en la crianza de aves de calidad.
Las autoridades locales, la Policía Nacional y los funcionarios del Gobierno central están trabajando para abordar la ola de robos que afecta a los criadores de gallos en las provincias de Espaillat y Santiago. A pesar de los esfuerzos por resolver los casos y detener a los responsables, los criadores se sienten desprotegidos y ven con preocupación la impunidad con la que operan las bandas organizadas dedicadas al robo de gallos de pelea. La colaboración entre las autoridades y la comunidad criadora es fundamental para encontrar soluciones efectivas y brindar la seguridad necesaria a quienes se dedican a la crianza de aves de calidad en la región norte del país. La lucha contra la delincuencia en este sector es una prioridad para proteger el trabajo y el patrimonio de los criadores de gallos de pelea en Espaillat y Santiago.
