Manuel Díaz, un destacado exdiputado de la provincia de San Cristóbal en la República Dominicana, está siendo velado en la funeraria Blandino del Distrito Nacional. Su fallecimiento ocurrió repentinamente en su residencia en Villa Altagracia. En el velorio se encuentran presentes numerosos amigos, familiares, políticos y funcionarios públicos, quienes han acudido para mostrar sus condolencias a la familia del excongresista. La Cámara de Diputados le está rindiendo honores con una guardia en la capilla de la funeraria, cumpliendo con el pedido de la familia.
Amado Díaz, diputado del Partido Revolucionario Moderno (PRM), ha expresado su aprecio y amistad hacia Manuel Díaz, recordando los tiempos en los que compartieron en la cámara baja. El fallecido fue diputado durante 20 años, lo que demuestra su larga trayectoria en el ámbito político del país. Por su parte, el secretario general del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), Charlie Mariotti, ha destacado la importancia de Manuel Díaz como una figura clave dentro del partido, describiendo su fallecimiento como una gran pérdida para la organización.
A pesar de que las investigaciones sobre la muerte del exdiputado aún están en curso, se presume que falleció de forma natural según indica Charlie Mariotti. Radhamés Camacho, quien fue compañero de partido y diputado junto a Manuel Díaz, ha recordado la firmeza y solidaridad que caracterizaban al fallecido. Camacho se ha mostrado visiblemente afectado por la noticia y ha expresado su dolor por la pérdida. El sepelio de Manuel Díaz está programado para el miércoles a las 4:00 de la tarde en su provincia natal, San Cristóbal.
La presencia de diputados y exdiputados, senadores y congresistas actuales en el velorio de Manuel Díaz demuestra el respeto y aprecio que generó en el ámbito político dominicano. Su larga trayectoria como legislador y su compromiso con la comunidad han dejado una huella imborrable entre sus colegas y amigos. El exdiputado fue una figura respetada y querida en su provincia y en todo el país, lo que se refleja en la multitud de personas que se han acercado para rendirle homenaje en su despedida.
La muerte de Manuel Díaz ha sido un golpe duro para sus compañeros de partido y para la comunidad en general. Su legado como político y como persona solidaria y comprometida con la justicia y el bienestar de su pueblo perdurará en la memoria de quienes tuvieron el privilegio de conocerlo. El funeral de Díaz será un momento de despedida y honra a su trayectoria política y personal, donde se recordarán sus aportes y se destacará su influencia positiva en la sociedad dominicana. Su ausencia dejará un vacío en la política local, pero su ejemplo y legado seguirán vivos en aquellos que lo conocieron y apreciaron.
