El Coordinador del Gabinete de Política Social, Tony Peña Guaba, desmintió los rumores de que el gobierno había entregado 100 mil pesos a cada familia de las siete personas que murieron atropelladas en Azua. Explicó que en realidad solo se les había ayudado con los gastos funerarios, sin entregar dinero en efectivo. Peña Guaba afirmó que están brindando apoyo a estas familias para cubrir los costos del sepelio y mejorar su situación, ya que son personas muy pobres.
Las víctimas del trágico accidente en Azua formaban parte de una multitud que celebraba y consumía alcohol en medio de la carretera Francisco del Rosario Sánchez, que une San Juan con Azua, en la comunidad Bastida, municipio Las Yayas. Entre los fallecidos se encontraba un sargento de la Policía Nacional y un miembro del Ejército. El conductor responsable, Ángel Encarnación Bautista, fue puesto en libertad bajo fianza mientras enfrenta cargos preliminares por manejo temerario y exceso de velocidad.
Tony Peña Guaba brindó estas declaraciones a su entrada al Consejo de Ministros en el ayuntamiento de Santo Domingo Este, que preside el presidente Luis Abinader. Aseguró que el gobierno no ha entregado dinero en efectivo a las familias de las víctimas, sino que sólo ha proporcionado apoyo para los gastos funerarios. También mencionó que están trabajando para mejorar la situación de las familias afectadas por esta tragedia, considerando su situación de pobreza.
El accidente en Azua ha causado conmoción en la opinión pública y ha generado preguntas sobre la seguridad vial y la responsabilidad de los conductores en eventos trágicos como este. La comunidad de Bastida y el municipio Las Yayas han sido impactados por esta tragedia, y se espera que las autoridades tomen medidas para prevenir futuros accidentes y mejorar la seguridad en las carreteras de la región. El gobierno sigue comprometido en brindar apoyo a las familias afectadas por este lamentable suceso.
Por su parte, el conductor del vehículo involucrado en el accidente, Ángel Encarnación Bautista, enfrenta cargos por manejo temerario y exceso de velocidad. A pesar de haber sido dejado en libertad bajo fianza, deberá responder por su imprudencia al manejar y por las consecuencias mortales de sus actos. La justicia dominicana deberá llevar a cabo una investigación exhaustiva para determinar la responsabilidad de este conductor y garantizar que se haga justicia en este caso tan trágico.
En medio de la tragedia y la conmoción por el accidente en Azua, es importante recordar la importancia de la seguridad vial y la responsabilidad al volante. Los eventos como este nos recuerdan la fragilidad de la vida y la necesidad de respetar las normas de tránsito para prevenir tragedias evitables. El gobierno continuará brindando apoyo a las familias afectadas y trabajando para mejorar la seguridad en las carreteras, con el objetivo de prevenir futuros accidentes y proteger la vida de todos los ciudadanos.
