El ministro de Economía, Planificación y Desarrollo, Pável Isa Contreras, enfatizó la importancia de enfrentar con optimismo y determinación los desafíos de las reformas estructurales pendientes en República Dominicana para lograr un Estado más capaz, una economía más productiva y una sociedad más inclusiva. Aunque aún no hay una fecha concreta para abordar estos temas en el Consejo Económico y Social, el ministro considera que las condiciones están dadas para realizar estos cambios.

Durante una conferencia ofrecida a ejecutivos del sector privado, el ministro disertó sobre la necesidad de abordar reformas fiscales, de seguridad social, del sector agua y del sector eléctrico. Estas reformas se enmarcan en la búsqueda de alcanzar un crecimiento económico del 5% este año, así como en la moderación del déficit fiscal, la capitalización del Banco Central y la mejora de la calificación crediticia.

En cuanto al sector eléctrico, Isa Contreras reconoció que la distribución de energía es un punto débil que requiere mejoras para garantizar un suministro de calidad y evitar el hurto de servicios. Además, destacó la importancia de diversificar la matriz energética y transformar el sistema para lograr un mejor desempeño en este ámbito. También resaltó la necesidad de abordar de manera amplia las reformas fiscales, de seguridad social y administrativas del Estado.

El presidente de la Unión Nacional de Empresarios (UNE), Leonel Castellanos, respaldó la necesidad de emprender un proceso de reformas estructurales en República Dominicana, considerando el déficit fiscal acumulado, la deuda externa y los problemas en el sector eléctrico como señales de alerta para la economía del país. Castellanos planteó la importancia de equilibrar las finanzas públicas, promover la iniciativa privada y atraer inversión extranjera a través de un paquete de reformas integrales.

Pável Isa detalló los objetivos principales de cuatro reformas necesarias para la economía del país. La reforma fiscal busca dotar de capacidad al Estado para financiar servicios e infraestructuras esenciales, además de garantizar la sostenibilidad fiscal y macroeconómica. Por otro lado, la transformación en el sector eléctrico busca contribuir al uso eficiente de la energía, solucionar las pérdidas por distribución y mejorar la sostenibilidad fiscal. Asimismo, la reforma de la seguridad social busca asegurar un financiamiento suficiente para los servicios de salud, garantizar pensiones dignas y fortalecer la cohesión social. Por último, la reforma del sector agua pretende contribuir al uso eficiente del agua, a la sostenibilidad ambiental y garantizar el acceso a agua potable.

En conclusión, las reformas estructurales pendientes en República Dominicana son fundamentales para lograr un Estado más efectivo, una economía más productiva y una sociedad más inclusiva. A través de un proceso de reformas fiscales, del sector eléctrico, de la seguridad social y del sector agua, se busca mejorar los índices económicos y sociales del país, atrayendo inversión extranjera, promoviendo la iniciativa privada y garantizando un desarrollo sostenible a largo plazo.

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