París 2024 ha propuesto un enfoque más sostenible en los Juegos Olímpicos, con el objetivo de dejar una herencia verde para la ciudad. Se ha comprometido a reducir las emisiones normales de carbono a la mitad, con un total estimado de 1,58 millones de toneladas de CO2 equivalente, menos que ediciones anteriores como Londres y Río. La sostenibilidad de París se basa en el uso de recintos olímpicos existentes o temporales, evitando la necesidad de construcción masiva.

Los Juegos Olímpicos han servido como catalizador para importantes reformas en la ciudad de París, como la limpieza del Sena, que ha sido prohibido al baño durante casi un siglo por razones de salud. La limpieza del río ha sido una de las mejoras más significativas realizadas en preparación para París 2024, con la intención de hacer sus aguas aptas para la práctica de deportes acuáticos. La alcaldesa de París, Anne Hidalgo, ha sido una de las figuras clave en promover esta iniciativa.

Se estima que las obras realizadas para limpiar el Sena y preparar la ciudad para los Juegos Olímpicos han supuesto un desembolso de 1,400 millones de euros. Parte de estas obras incluyen la construcción de un depósito de agua en la estación de Austerlitz, que almacenará aguas usadas y precipitaciones para evitar vertidos directos al río. El objetivo de estas inversiones es mejorar la calidad de vida de los ciudadanos y garantizar un entorno más limpio para las futuras generaciones.

Además de las mejoras en el Sena, los Juegos Olímpicos de París 2024 dejarán nuevas construcciones permanentes que han sido diseñadas teniendo en cuenta el cambio climático. El estadio Porte de la Chapelle, el centro acuático de Saint-Denis y la Villa Olímpica y Paralímpica son ejemplos de estas nuevas infraestructuras. Todos los nuevos centros deportivos tendrán un alto rendimiento medioambiental y se abastecerán con electricidad renovable, contribuyendo a la reducción de emisiones.

La Villa Olímpica, que albergará casi 9,000 árboles una vez finalicen los Juegos, será transformada en un barrio residencial con 2,800 viviendas y seis hectáreas de espacios verdes. Esta iniciativa busca seguir fomentando la sostenibilidad de la ciudad y dejar un legado verde para las generaciones futuras. La apuesta por la sostenibilidad en París 2024 refleja un compromiso con el medio ambiente y el bienestar de la ciudadanía, demostrando que los Juegos Olímpicos pueden tener un impacto positivo duradero en las ciudades anfitrionas.

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