La Dirección General de Servicios Penitenciarios y Correccionales inauguró un nuevo Pabellón de Salud Mental en la cárcel de San Pedro de Macorís destinado a la atención de reclusos con trastornos mentales. Este nuevo espacio tiene capacidad para 48 internos y se convierte en el cuarto de su tipo en el país, sumándose a los ya existentes en La Victoria, Najayo Mujeres y Najayo Hombres. Con la apertura de este pabellón, 37 reclusos serán trasladados a la nueva área especializada, provenientes de las cárceles de Monte Plata, La Romana, Higüey y El Seibo.
Según el director de prisiones, Roberto Hernández Basilio, actualmente en la cárcel de San Pedro de Macorís hay 16 internos con problemas de salud mental. Hernández Basilio destacó la importancia de este nuevo espacio, señalando que muchas de las personas con trastornos mentales no deberían estar en prisión, ya que son inimputables. El director mencionó que estar en prisión ya representa un problema de salud mental y afirmó que es necesario garantizar un servicio digno a estas personas que, por diversas razones, se encuentran recluidas.
El pabellón de salud mental contará con la presencia permanente de un especialista en psiquiatría para brindar la asistencia adecuada a los internos. Además, las autoridades han asignado un fondo de 400,000 pesos para la compra de medicamentos, los cuales se entregarán de forma gratuita a los reclusos que no cuenten con seguro médico ni con los recursos necesarios para cubrir su tratamiento. Este monto se distribuye a nivel nacional y se va reponiendo a medida que se va utilizando para garantizar la continuidad del tratamiento.
En el acto inaugural del pabellón estuvo presente el defensor del pueblo, Pablo Ulloa, quien valoró la creación de este espacio debido a la "urgente necesidad" de atención para los reclusos con condiciones de salud mental en las cárceles del país. Sin embargo, Ulloa también criticó el elevado porcentaje de personas que cumplen prisión preventiva, que alcanza el 57 % e incluye a aquellos con condiciones psiquiátricas. El defensor del pueblo instó a trabajar para reducir este porcentaje y garantizar un sistema penitenciario más justo y equitativo.
La apertura de este nuevo Pabellón de Salud Mental en la cárcel de San Pedro de Macorís refleja un avance en la atención y el tratamiento de los reclusos con trastornos mentales en la República Dominicana. La presencia de un especialista en psiquiatría y la asignación de fondos para la compra de medicamentos son medidas que buscan garantizar una atención adecuada y digna a estos internos que requieren cuidados especiales. A pesar de los avances, sigue siendo necesario abordar el problema de la prisión preventiva y trabajar en la implementación de medidas que garanticen un sistema penitenciario más humano y respetuoso de los derechos de todos los reclusos.
