El trabajo infantil sigue siendo una realidad en la República Dominicana, donde muchos menores se dedican a la venta informal en las calles. Esta práctica es definida por la Organización Internacional del Trabajo como perjudicial para el desarrollo físico y psicológico de los niños y niñas. A pesar de los esfuerzos de gobiernos y entidades particulares para combatir esta forma de abuso, sigue presente en el país.
Existen labores que conllevan un mayor peligro físico y emocional para los niños que trabajan, como la venta de paletas en las calles. Muchos de estos menores se dedican a esta actividad, enfrentando condiciones precarias y exponiéndose a peligros como ser arrollados por vehículos o enfermarse por virus circulantes. Muchas veces son utilizados por adultos para obtener recursos económicos.
A pesar de estar prohibido por ley, la sociedad parece haber normalizado este tipo de trabajo infantil, y las autoridades parecen mostrar escaso interés en contrarrestar la situación. Muchos de estos niños están desnutridos, mal vestidos y presentan signos de abandono. Trabajan largas jornadas, sin descanso ni acceso a comida, enfrentando situaciones de vulnerabilidad.
Los niños que trabajan en las calles a menudo expresan que lo hacen para ayudar a sus familias enfermas o para poder comprar comida y pagar la casa. Sus jornadas de trabajo son largas y en condiciones precarias. A pesar de que se han registrado mejoras en las cifras de trabajo infantil en República Dominicana, la crisis provocada por la pandemia de COVID-19 ha aumentado la vulnerabilidad de estos niños.
La Constitución de la República Dominicana protege los derechos de los menores de edad, prohibiendo el trabajo infantil hasta los 14 años. Sin embargo, las cifras indican que este sigue siendo un problema en el país, especialmente en áreas rurales y entre los sectores más pobres de la población. Es necesario seguir trabajando para erradicar esta práctica y garantizar el desarrollo pleno de los niños y niñas.
Organismos como el Consejo Nacional para la Niñez y la Adolescencia (Conani) han implementado programas para apoyar a estos menores en situación de trabajo infantil. A través de intervenciones como el Programa de Intervención de Niños en Situación de Calle y Peores Formas de Trabajo Infantil, se busca rescatar a estos niños, brindarles apoyo integral y garantizar el respeto de sus derechos fundamentales. A pesar de los esfuerzos realizados, el trabajo infantil sigue siendo un gran desafío en la República Dominicana.