Durante la celebración del Día Mundial contra la Trata de personas, la ministra de la Mujer, Mayra Jiménez, informó que las casas de acogida han recibido 72 víctimas en lo que va de año, la mayoría de nacionalidad colombiana. Desde la apertura de la casa de acogida durante el primer mandato del presidente Luis Abinader en 2022, el Ministerio de la Mujer ha proporcionado protección a 123 víctimas de trata de personas. La ministra destacó la colaboración con el Ministerio Público, la Policía Nacional y otras entidades para investigar y sancionar los casos, además de brindar apoyo a las víctimas.
La ministra señaló que la trata de personas no solo afecta la integridad física y psicológica de las víctimas, sino que también perpetúa el ciclo de la pobreza al privarlas de oportunidades educativas y laborales. Asimismo, promueve la desigualdad al afectar desproporcionadamente a grupos vulnerables y debilita la cohesión social al erosionar la confianza en la sociedad. En los últimos años, el número de casas de acogida para víctimas de violencia de género ha aumentado, lo que refleja la necesidad de apoyo por parte del Ministerio de la Mujer para proteger a las mujeres y sus dependientes.
Durante el evento, el ministro de Relaciones Exteriores, Roberto Álvarez, destacó la importancia del III Plan Nacional de Acción contra la Trata de Personas y el Tráfico Ilícito de Migrantes 2022-2024 como una herramienta esencial para abordar esta problemática. A través de sus ejes estratégicos de prevención, persecución y protección, se busca enfrentar la trata desde múltiples frentes, implementando políticas y acciones concretas para proteger a las víctimas, sancionar a los responsables y prevenir nuevos casos.
Según la Misión Internacional de Justicia, se ha registrado una disminución en los casos de explotación sexual de niños, niñas y adolescentes en el país, lo cual se atribuye a los esfuerzos coordinados de las instituciones estatales. El canciller expresó su satisfacción por este avance y destacó la importancia de seguir trabajando en la prevención y protección de las víctimas. En este sentido, se hace hincapié en la importancia de fortalecer la colaboración entre diferentes entidades para combatir la trata de personas.
En cuanto a los temas abordados en el evento, se destacó la relevancia de las casas de acogida como refugios para las víctimas de la trata de personas. Además, se resaltó la situación específica de las víctimas de nacionalidad colombiana, que representan una parte significativa de los casos atendidos. La necesidad de abordar la trata desde una perspectiva integral, que incluya acciones de prevención, persecución y protección, se enfatizó como un enfoque fundamental para combatir este flagelo.
En resumen, la lucha contra la trata de personas es un desafío continuo que requiere del compromiso de múltiples actores, incluidos el gobierno, la sociedad civil y la comunidad internacional. A través de la colaboración y la implementación de políticas y acciones concretas, se busca proteger a las víctimas, sancionar a los responsables y prevenir nuevos casos de explotación. La sensibilización y la formación son clave en esta lucha, así como el fortalecimiento de las redes de apoyo para brindar asistencia a quienes han sido afectados por este grave delito.
