Obenlly de los Santos, de 34 años, se convirtió en la octava víctima fatal del accidente ocurrido el 1 de septiembre en la comunidad de Bastida, en Azua, donde un camión cargado de aguacates embistió a un grupo de personas frente a un lugar de expendio de bebidas. De acuerdo con la directora del Hospital Alejandro Cabral, Melinda Saldívar, De los Santos no logró sobrevivir a las lesiones graves causadas por el accidente. La penúltima víctima, Mary Peña, de 45 años, también sucumbió a sus heridas en el mismo centro de salud.

El trágico suceso tuvo lugar en las fiestas patronales de Bastida, donde una multitud se encontraba celebrando. Al terminar el evento, una parte de los asistentes se trasladó al colmado Gaby, ubicado en la carretera Sánchez. En ese momento, un camión cargado de aguacates se aproximó sin reducir la velocidad y arrolló a las personas que se encontraban en su camino. Como resultado, 41 personas fueron trasladadas a hospitales cercanos y se registraron seis fallecimientos.

En cuanto al conductor del vehículo, Ángel Encarnación Bautista, el Juzgado de Paz Ordinario de Las Yayas de Viajama decidió dejarlo en libertad condicional. A Encarnación Bautista se le impuso una garantía económica, impedimento de salida del país y presentación periódica ante el Ministerio Público de Azua durante seis meses, mientras se llevan a cabo las investigaciones correspondientes. El conductor enfrenta cargos preliminares por manejo temerario, exceso de velocidad y lesiones culposas que resultaron en la muerte de seis personas.

La noticia del fallecimiento de Obenlly de los Santos fue confirmada por la directora del Hospital Alejandro Cabral, quien expresó sus condolencias por la pérdida. A pesar de los esfuerzos del equipo médico, De los Santos no logró sobrevivir a las graves lesiones sufridas en el accidente. Por otro lado, Mary Peña, la séptima víctima mortal del siniestro, también perdió la vida en el mismo centro de salud tras varios días de lucha.

El accidente en Bastida ha dejado una profunda huella en la comunidad y en todo el país, conmocionando a la población y generando un debate sobre la seguridad vial y la responsabilidad de los conductores. Las investigaciones continúan para esclarecer las circunstancias que llevaron a este trágico suceso y para determinar las posibles negligencias que pudieron haber contribuido a la pérdida de vidas humanas. Mientras tanto, las familias de las víctimas lamentan profundamente sus pérdidas y exigen justicia ante esta tragedia que ha dejado un doloroso vacío en sus corazones.

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