En el Día de la Virgen de Las Mercedes, monseñor Carlos Tomás Morel Diplán, administrador apostólico de la Diócesis de La Vega, presidió la eucaristía en el Santo Cerro, una de las celebraciones religiosas más importantes de la República Dominicana. Durante la ceremonia, la vicepresidenta Raquel Peña participó leyendo la primera palabra del oficio religioso. En su homilía, monseñor Morel destacó la importancia de la unión familiar, el fortalecimiento de la educación y la defensa de los valores fundamentales en el hogar para el desarrollo humano. Expresó su preocupación por la violencia y el maltrato que ocurren en muchos hogares hoy en día, subrayando la necesidad de cultivar un ambiente de amor y respeto en las familias.
El religioso hizo un llamado a la sociedad para formar a las personas en principios sólidos, transmitidos desde la familia, como base para lograr la paz y el desarrollo social. Instó a los padres a cuidar y brindar cariño, respeto y un buen ejemplo de vida a sus hijos, así como a proporcionar una educación de calidad que les permita desarrollar sus talentos y contribuir al bienestar de la sociedad. Monseñor Morel también resaltó la importancia de la devoción a la Virgen de Las Mercedes, que ha sido parte integral de la cultura dominicana, promoviendo la dignidad humana y el cuidado de los más vulnerables.
La celebración culminó con la invitación a todos los presentes a cuidar y fomentar la devoción a la Virgen de Las Mercedes, que ha convertido al Santo Cerro en un lugar de peregrinación y reflexión espiritual durante siglos. Monseñor Morel exhortó a los padres a transmitir esta tradición a las nuevas generaciones para que no se pierda y se siga fortaleciendo en la comunidad. La devoción a la Virgen de Las Mercedes se ha arraigado en la historia y esencia del pueblo dominicano, siendo un símbolo de fe y protección para muchos fieles que acuden al Santo Cerro en busca de consuelo y esperanza.
La presencia de la vicepresidenta Raquel Peña en la eucaristía en el Santo Cerro resalta la importancia de la celebración para la sociedad dominicana. Su participación en la lectura de la primera palabra del oficio religioso muestra el reconocimiento oficial de la importancia de la devoción a la Virgen de Las Mercedes en la cultura del país. La ceremonia religiosa fue un momento de reflexión y unión para todos los presentes, quienes se congregaron para honrar a la Virgen y renovar su fe en un ambiente de paz y armonía.
Monseñor Morel hizo hincapié en la necesidad de proteger los valores esenciales en la familia, que son fundamentales para el desarrollo humano y el bienestar de la sociedad en su conjunto. En un mundo donde la violencia y el maltrato familiar son una realidad dolorosa, el religioso instó a los padres a ser un ejemplo de amor y respeto para sus hijos, creando un ambiente seguro y propicio para su crecimiento y desarrollo. La educación de calidad y la promoción de los valores son pilares clave en la construcción de una sociedad justa y equitativa, donde cada individuo pueda alcanzar su máximo potencial y contribuir al progreso colectivo.