Dos personas fallecieron y una resultó herida en un ataque a balazos perpetrado por un hombre en el Ensanche La Paz del Distrito Nacional en Santo Domingo. Las víctimas mortales fueron Enmanuel Antonio Grullón Terrero, de 22 años, y Juan Manuel Tejeda Ramírez, de 26 años. El herido fue identificado como David Peña Corniel, de 31 años, quien se encuentra ingresado en la Clínica Independencia con una herida en el tórax.
Según el informe policial, las heridas fueron ocasionadas por un hombre conocido como "Pablitín", supuestamente debido a disputas personales anteriores. El agresor propinó los disparos en el tórax y otras partes del cuerpo, causando la muerte inmediata de Grullón Terrero y Peña Corniel. La Policía indicó que agentes de la Dirección de Investigación Criminal (Dicrim) acudieron rápidamente a la escena y están llevando a cabo investigaciones para esclarecer el incidente, exhortando a "Pablitín" a entregarse a las autoridades.
Este trágico suceso ha conmocionado a la comunidad del Ensanche La Paz y ha generado preocupación por la violencia armada en la zona. Las autoridades han reiterado la importancia de resolver conflictos de manera pacífica y abstenerse de recurrir a la violencia para resolver disputas personales. Se espera que se tomen medidas para prevenir este tipo de incidentes y garantizar la seguridad de los ciudadanos.
La identidad de "Pablitín" ha sido difundida por las autoridades, quienes están trabajando para dar con su paradero y llevarlo ante la justicia. Se espera que la captura del agresor ayude a esclarecer los motivos detrás del ataque y proporcionar justicia a las familias de las víctimas. La sociedad dominicana ha expresado su consternación por este trágico evento y ha llamado a la unidad y la solidaridad en tiempos difíciles como este.
La violencia armada sigue siendo un problema grave en la República Dominicana, y es fundamental abordar las causas subyacentes y implementar medidas efectivas para prevenirla. Se necesita una mayor colaboración entre las autoridades, la sociedad civil y la comunidad en general para trabajar juntos en la creación de un entorno seguro y pacífico para todos. Es necesario fomentar el diálogo y la resolución pacífica de conflictos para evitar tragedias como la ocurrida en el Ensanche La Paz.
Las familias de las víctimas han expresado su dolor y su indignación por lo ocurrido, pidiendo justicia y medidas para prevenir futuros actos de violencia. Se espera que las autoridades tomen acciones concretas para garantizar la seguridad de los ciudadanos y prevenir que hechos como este se repitan en el futuro. La solidaridad y el apoyo de la comunidad son fundamentales en momentos de crisis como el que atraviesa la sociedad dominicana en este momento.
