El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, criticó a la Unión Europea y al alto representante de la UE para Asuntos Exteriores, Josep Borrell, calificándolos de "vergüenza" por expresar preocupación por los acontecimientos en Venezuela. Maduro acusó a la UE de reconocer a Juan Guaidó y de irresponsabilidad en su actuar en Ucrania. El mandatario rechazó las peticiones de la UE de respetar las manifestaciones en el país y cuestionó la calificación de "pacíficas" dadas por Borrell a dichas protestas que han generado violencia.
La Unión Europea solicitó una mayor verificación independiente de los registros electorales tras las elecciones presidenciales del 28 de julio en Venezuela. Los informes de las misiones internacionales de observación electoral indicaron que dichas elecciones no cumplieron con las normas internacionales de integridad electoral. La UE exhortó al ente electoral venezolano a publicar las actas oficiales de las mesas de votación, ya que sin pruebas que los respalden, los resultados publicados por el CNE no pueden ser reconocidos.
El Consejo Nacional Electoral ratificó el triunfo y reelección de Maduro con el 51,95% de los votos, mientras que Edmundo González Urrutia obtuvo el 43,18% de los apoyos. Sin embargo, las actas de los testigos de votación en más del 80% de las mesas, disponibles en resultadosconvzla.com, según la líder opositora María Corina Machado, indican que González Urrutia es el presidente electo de Venezuela. La oposición ha cuestionado la transparencia y legitimidad de los resultados electorales.
La respuesta de Maduro a las críticas de la UE fue contundente, calificando a la Unión Europea y a Borrell como una "vergüenza" y negando las acusaciones de represión a manifestaciones pacíficas. El mandatario criticó la solicitud de la UE de verificar los registros electorales y defendió la legitimidad de su victoria en las elecciones. La tensión entre el gobierno de Maduro y la Unión Europea continúa en aumento debido a las diferencias en cuanto a la transparencia y legitimidad de los comicios en Venezuela.
La posición de la Unión Europea sobre Venezuela ha sido de preocupación y de llamados a una mayor verificación de los resultados electorales. La UE ha señalado que las elecciones presidenciales no cumplieron con las normas internacionales de integridad electoral y ha pedido pruebas que respalden los resultados proclamados por el CNE. La falta de transparencia en el proceso electoral ha generado tensiones entre Venezuela y la comunidad internacional, incluida la UE, que sigue de cerca la situación en el país caribeño y expresa su inquietud por los acontecimientos.
