El presidente francés, Emmanuel Macron, ha convocado elecciones legislativas anticipadas tras el aplastante triunfo de la ultraderecha de Marine Le Pen en las elecciones europeas. Macron considera que la subida de los nacionalistas y demagogos representa un peligro para Francia y para Europa. Los franceses regresarán a las urnas el 30 de junio y el 7 de julio para escoger a los 577 diputados de la Asamblea Nacional francesa, lo que podría cambiar la composición político del país y forzar a Macron a cohabitar con un Gobierno de distinto color político al suyo.

La decisión de Macron muestra audacia para intentar superar la situación creada y para no tener miedo del pueblo francés. Las nuevas elecciones llegarán solo dos años después de las de 2022, en las que el partido de Macron perdió la mayoría absoluta, lo que ha generado dificultades al Gobierno para aprobar sus reformas. La líder de extrema derecha, Marine Le Pen, considera que su partido ha demostrado ser la gran fuerza de la alternancia en Francia y se muestra lista para asumir el poder si los franceses les dan su confianza.

En las elecciones europeas, la tasa de participación fue del 52,5%, la más alta en 20 años. Además de Le Pen y Macron, otras candidaturas con representación europea fueron el izquierdista La Francia Insumisa, los republicanos conservadores, el ultranacionalista Reconquista y los ecologistas franceses. Marine Le Pen considera que los resultados del RN son los mejores de un partido en Francia en las últimas cuatro décadas y demuestran que el partido es la gran fuerza de la alternancia en el país.

La segunda vuelta de las elecciones legislativas tendrá lugar menos de tres semanas antes del inicio de los Juegos Olímpicos de París, pero el evento no se verá afectado sea cual sea el resultado de los comicios. La victoria del RN podría condicionar la elección del primer ministro y forzar a Macron a cohabitar con un Gobierno de distinto color político al suyo. La hipotética victoria de Le Pen podría cambiar la composición del Gobierno y de la Asamblea Nacional, generando un nuevo escenario político en Francia. La decisión del presidente francés de convocar elecciones anticipadas busca devolver la palabra al pueblo y evitar un posible peligro para el país y para Europa.

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