El Departamento de Policía de la ciudad de Nueva York (NYPD) ha anunciado que a partir del próximo lunes 17 de este mes, prohibirá a sus agentes el uso de barbas, patillas, bigotes y otros aspectos faciales, con excepción de los agentes encubiertos, aquellos con exenciones religiosas o médicas. Esta medida se aplicará a todos los agentes uniformados para garantizar los altos estándares de profesionalismo del departamento, según un comunicado oficial.
Esta decisión de prohibir el "vello facial" en los agentes de NYPD se tomó después de que en 2020 se relajaran las reglas al respecto, debido a una demanda colectiva presentada por un policía musulmán que había sido suspendido por negarse a recortar su barba por motivos religiosos. La Asociación Benevolente (PBA), el sindicato de policía municipal más grande del mundo, estará supervisando el proceso para asegurarse de que se aplique de manera justa y de que NYPD cumpla con los términos del acuerdo de 2018.
Actualmente, el NYPD está formado por 33,695 agentes, entre los que se encuentran más de tres mil dominicanos. En el año 2023, más de 2,500 agentes se retiraron y este año las jubilaciones han aumentado en un 11%. Se mencionan como posibles causas de estas jubilaciones el estrés causado por largas jornadas de trabajo, la retórica anti policial respaldada por algunos políticos y la reforma penal activada en 2020, que algunos relacionan con impunidad y anarquía en la ciudad.
La iniciativa de prohibir el uso de barbas y otros aspectos faciales en los agentes de NYPD ha generado controversia y debate en la ciudad de Nueva York. Algunos ciudadanos apoyan la medida, argumentando que la apariencia de los agentes debe reflejar un alto nivel de profesionalismo. Otros, en cambio, critican la decisión, sosteniendo que se están limitando los derechos individuales de los agentes y que la apariencia física no debería influir en su capacidad para cumplir con sus funciones policiales.
La diversidad en el cuerpo policial, con más de tres mil dominicanos entre sus filas, también ha sido un punto de discusión en relación con esta medida. Algunos consideran que la prohibición de barbas y otros aspectos faciales puede afectar la representación de diferentes culturas y religiones dentro del departamento de policía. La supervisión de la Asociación Benevolente (PBA) se presenta como un mecanismo para garantizar que el proceso se lleve a cabo de manera justa y respetando las exenciones religiosas o médicas de los agentes.
En medio de un contexto en el que las jubilaciones de agentes de NYPD han aumentado, se destaca la importancia de mantener un ambiente laboral que promueva el bienestar de los funcionarios policiales. La reforma penal activada en 2020 y la retórica anti policial respaldada por algunos sectores, han sido señaladas como posibles causas de estrés y desgaste en la fuerza policial. En este escenario, la aplicación de esta nueva medida sobre el uso de barbas y aspectos faciales en los agentes de NYPD plantea desafíos y reflexiones sobre la imagen y la diversidad en el cuerpo policial de la ciudad de Nueva York.
