Los cancilleres de Haití y República Dominicana se reunieron en Paraguay durante la Asamblea General de la Organización de Estados Americanos (OEA). Durante la reunión, la canciller de Haití, Dominique Dupuy, y el ministro de Relaciones Exteriores dominicano, Roberto Álvarez, discutieron la situación de ambos países. La OEA inauguró su 54 Asamblea General en Paraguay con el lema 'Integridad y Seguridad para el Desarrollo de la Región'. Álvarez consideró esencial implementar controles más estrictos y colaborar internacionalmente para detener el flujo de armas ilegales hacia Haití.

Durante la Asamblea General de la OEA, el canciller dominicano hizo un llamado al cumplimiento de las resoluciones 2653 y 2699 del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, que buscan fortalecer el embargo de armas que llegan ilícitamente a Haití. Álvarez señaló que el tráfico de armas es una de las principales amenazas para la seguridad de República Dominicana y la región, especialmente debido a que estas armas caen en manos de organizaciones criminales en Haití. Destacó la importancia de combatir eficazmente este grave problema para garantizar la seguridad ciudadana, que es fundamental para el desarrollo sostenible, el crecimiento económico y el bienestar social.

El canciller Álvarez insistió en la necesidad de implementar controles más estrictos para detener el tráfico de armas hacia Haití, destacando la importancia de la cooperación internacional en este tema. En la reunión con la canciller de Haití, se discutieron estrategias para abordar esta problemática y fortalecer la seguridad en ambos países. Álvarez hizo referencia a las declaraciones de la canciller de Jamaica sobre la proliferación de armas en manos de organizaciones criminales en Haití, subrayando la urgencia de abordar esta situación de manera efectiva y colaborativa.

La seguridad ciudadana fue resaltada como un requisito fundamental para el desarrollo sostenible por parte del canciller dominicano durante la Asamblea General de la OEA. Álvarez enfatizó que sin seguridad no puede haber crecimiento económico ni bienestar social, por lo que es crucial combatir con eficacia el tráfico de armas ilegales que representan una grave amenaza para la región. La cooperación internacional y la implementación de controles más estrictos fueron señalados como herramientas clave para detener este flujo de armas y garantizar la estabilidad en Haití y República Dominicana.

En el marco de la Asamblea General de la OEA, la reunión entre los cancilleres de Haití y República Dominicana sirvió para abordar la problemática del tráfico de armas ilegales hacia Haití. Se destacó la importancia de fortalecer la seguridad en la región y de colaborar internacionalmente para combatir eficazmente esta amenaza. El canciller Álvarez hizo un llamado al cumplimiento de resoluciones internacionales que buscan frenar el flujo ilícito de armas hacia Haití, subrayando la importancia de la seguridad ciudadana para el desarrollo sostenible y el bienestar social en ambos países.

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