El fogueo de la campaña política afectó el trabajo legislativo en el Congreso Nacional, que se reanudó con la primera sesión ordinaria después de las elecciones presidenciales. Muchos diputados de la oposición que se candidatearon para repetir en sus cargos o pasar al Senado volvieron a su labor legislativa en medio de un ambiente de lamentaciones después de los resultados del domingo 19 de mayo, con abrazos, lágrimas y consolaciones evidentes.

La sesión comenzó dos horas después de lo programado, con 104 diputados presentes. Durante la entrada al hemiciclo, se observaron abrazos, lamentaciones y consolaciones a los opositores que perdieron en los comicios del domingo. Algunos diputados se mostraban sorprendidos al darse cuenta de que sus compañeros habían perdido en sus candidaturas. El presidente de la Cámara de Diputados felicitó a los ganadores y reconoció el arduo trabajo de los diputados que no fueron reelegidos, destacando su labor a pesar de no obtener los votos necesarios.

El vocero del PLD en el hemiciclo, Luis Henríquez, tampoco logró los votos suficientes para reelegirse en Santo Domingo Este y lamentó su situación, recomendando a la nueva mayoría perremeísta que utilice su alta matrícula congresual para avanzar en los proyectos pendientes. La veterana diputada Lila Alburquerque, del PRSC, también se despidió de su curul tras perder en las elecciones, expresando su pesar por no poder continuar en un momento de transformaciones en el país. Otros diputados pidieron humildad y prudencia al PRM, ahora que cuentan con mayoría en el Congreso.

Durante la sesión, los diputados destacaron la labor de la Junta Central Electoral durante los comicios y expresaron su satisfacción por la poca cantidad de quejas sobre los resultados de las elecciones. También felicitaron a los dominicanos por participar con civismo en las elecciones, en las cuales resultó reelecto Luis Abinader como presidente. En medio de los discursos, se reconoció el trabajo del órgano comicial y se hicieron llamados a la humildad y prudencia a la nueva mayoría en el Congreso.

En general, la sesión legislativa posterior a las elecciones presidenciales estuvo marcada por el ambiente de lamentaciones y despedidas de diputados de la oposición que no lograron reelegirse. Los abrazos, lágrimas y consolaciones fueron evidentes durante la entrada al hemiciclo, donde algunos diputados mostraron sorpresa al enterarse de los resultados electorales. A pesar de la situación, se destacó la labor de los diputados que no fueron reelegidos y se hizo un llamado a la humildad y prudencia al nuevo partido mayoritario en el Congreso.

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