El Senado aprobó un proyecto de reforma constitucional de manera rápida y sin obstáculos el viernes, y la Cámara de Diputados tiene previsto debatir la iniciativa solo cuatro días después. La oposición ha atacado la legitimidad de la propuesta, sin embargo, los legisladores del oficialismo han argumentado que el proyecto fue estudiado y debatido en una comisión bicameral, lo que ha permitido acelerar su aprobación en la Cámara de Diputados sin necesidad de enviarlo a comisiones.
La premura en aprobar la reforma constitucional se debe a que el proyecto ya fue analizado por una comisión bicameral compuesta por diputados y senadores. Esta comisión estuvo integrada por 18 diputados y nueve senadores, quienes analizaron la pieza durante un mes, escucharon a sectores involucrados en la reforma y realizaron modificaciones a la propuesta original del presidente Abinader. Algunos de los cambios más significativos incluyen la reducción de 20 diputados en la Cámara Baja y la integración del presidente del Tribunal Constitucional al Consejo Nacional de la Magistratura.
El diputado Ramón Bueno del PRM vaticina que el proyecto de reforma constitucional se aprobará rápidamente y sin obstáculos a pesar de las críticas de la oposición. Por su parte, el diputado Carlos Sánchez, del oficialismo, considera que la reforma constitucional es necesaria para garantizar la institucionalidad en el país y debe ser aprobada lo antes posible. Sin embargo, representantes de la oposición como Ramón Raposo del PRD y Tobías Crespo de la Fuerza del Pueblo critican el proceso de la reforma, argumentando que fue ilegítimo al no haber sido consultado públicamente, sin un referendo y sin considerar las observaciones de la oposición en la comisión bicameral.
Si la Cámara de Diputados aprueba el proyecto constitucional, los diputados y senadores deberán reunirse en 15 días como Asamblea Nacional para modificar los puntos de la Constitución propuestos por el presidente Abinader. La oposición critica la aprobación del proyecto argumentando que, aunque pueda ser legal debido a los votos del PRM en ambas cámaras, sería ilegítima si no se tiene en cuenta la opinión de la oposición. A pesar de las críticas, el oficialismo está confiado en que la reforma constitucional se aprobará sin problemas y considera que es una necesidad para garantizar la institucionalidad en el país.
