Decenas de dirigentes y simpatizantes del Partido Revolucionario Moderno (PRM) llevaron a cabo una protesta para exigir la cancelación de la directora del hospital de Villa Montellano, en Puerto Plata. Alegan que la doctora Yudelka Sánchez no forma parte del partido oficialista. La manifestación fue liderada por Héctor Almonte, alcalde de la demarcación, e incluyó una marcha y una concentración en el centro de salud. Los activistas piden que Sánchez sea reemplazada, ya que recientemente fue confirmada como directora del hospital por el Servicio Nacional de Salud (SNS) después de ocupar el cargo de manera interina durante nueve meses.
La doctora Yudelka Sánchez habría sido designada por el SNS debido a su alto rendimiento profesional, pero al ser consultada por Diario Libre, prefirió no hacer declaraciones sobre la situación. La protesta de los dirigentes y simpatizantes del PRM afectó los servicios médicos que ofrece el centro de salud. Pacientes que buscaban tratamientos se quejaron por los inconvenientes causados por la manifestación. Una madre denunció que el personal médico no pudo atender a su hijo, menor de edad y afectado por dengue, y responsabilizó a los manifestantes en caso de que el cuadro clínico de su hijo empeore.
Esta protesta es un reflejo del clima político tenso que se vive en la República Dominicana, donde las disputas partidarias a menudo se traducen en acciones que afectan a la población. La demanda de destitución de la directora del hospital de Villa Montellano muestra cómo la política puede interferir en la prestación de servicios de salud básicos. La falta de atención médica a un niño enfermo por la manifestación ilustra cómo las acciones políticas pueden tener consecuencias directas en la vida de los ciudadanos comunes.
El Partido Revolucionario Moderno (PRM) ha manifestado su descontento con la designación de la doctora Yudelka Sánchez como directora del hospital de Villa Montellano, alegando que no cuenta con la afiliación política necesaria. Esta postura refleja la importancia que algunos partidos políticos dan a la lealtad partidaria en la ocupación de cargos públicos, incluso en el sector de la salud. La manifestación liderada por Héctor Almonte y otros dirigentes busca presionar para lograr un cambio en la dirección del hospital, demostrando que la política puede interferir en la gestión de la salud pública.
La falta de respuesta por parte de la doctora Yudelka Sánchez a las denuncias en su contra sugiere que prefiere mantener un perfil bajo en medio de la controversia política. A pesar de que fue designada por su alto rendimiento profesional, su permanencia en el cargo está siendo cuestionada por motivos políticos. La afectación de los servicios médicos en el hospital de Villa Montellano debido a la protesta ilustra cómo los conflictos políticos pueden perjudicar a los ciudadanos más vulnerables, que se ven privados de atención médica por disputas partidarias.
En un contexto político polarizado, como el que se vive en la República Dominicana, las manifestaciones como la llevada a cabo por los dirigentes y simpatizantes del PRM pueden convertirse en una herramienta de presión para lograr cambios en la gestión pública. Sin embargo, es importante considerar también el impacto que estas protestas tienen en la población, especialmente en aquellos que más necesitan acceso a servicios de salud. La cancelación de la directora del hospital de Villa Montellano sigue siendo un tema de controversia que refleja la complejidad de la relación entre la política y la prestación de servicios públicos esenciales.
