El candidato presidencial de Fuerza del Pueblo, Leonel Fernández, acusó al Partido Revolucionario Moderno (PRM) de estar innovando en la política dominicana mediante un "sistema de corrupción" que incluye la compra de funcionarios electos de la oposición, algo nunca antes visto en el país. Fernández destacó que el PRM está sustituyendo la democracia por la "dinecracia", y señaló que la diferencia entre sus gobiernos y el PRM es que él sí logró transformar el país, especialmente en regiones como el Cibao y Punta Cana.
Leonel Fernández mencionó que la Fuerza del Pueblo tiene una gran fuerza mayoritaria en Santo Domingo Norte, demostrada en manifestaciones multitudinarias. Explicó que en esta zona existe un legado histórico debido a obras realizadas durante su gestión, como la Ciudad Sanitaria y el Metro de Santo Domingo, y afirmó que la alcaldía de Santo Domingo Norte le fue "arrebatada" mediante la compra de votantes. Fernández expresó su afecto por el alcalde saliente, Carlos Guzmán, y aseguró que la salida de este no afectará el partido.
En cuanto a la alianza opositora Rescate RD y las salidas de dirigentes de los partidos que la conforman, Fernández afirmó que la realidad electoral muestra al PRM como el partido con mayor simpatía de los votantes, seguido por la Fuerza del Pueblo y el Partido de la Liberación Dominicana (PLD). Advirtió que el PRM intenta comprar voluntades a través del presupuesto nacional, pero indicó que la oposición sigue siendo mayoría y que no permitirán que se aprovechen de la situación.
Leonel Fernández no precisó si habrá una segunda vuelta en las elecciones de mayo próximo, pero señaló que el PRM está intentando convencer a dirigentes políticos y funcionarios electos para sumarse a su causa. Sus declaraciones se produjeron antes de participar en un almuerzo organizado por la Asociación Nacional de Empresas e Industrias de Herrera. Fernández destacó que durante su mandato se realizaron importantes transformaciones en el país, especialmente en regiones como el Cibao y Punta Cana, lo que contrasta con las prácticas corruptas que asegura está implementando el PRM.
