El Ejército de República Dominicana ha tomado medidas para proteger la zona fronteriza del país y evitar que bandas de delincuentes haitianos utilicen la nación como ruta de escape. Con brigadas de infantería en San Juan de la Maguana, Valverde Mao y Barahona, el Ejército ha cubierto toda la franja fronteriza con Haití. Además, la vigilancia se extiende por aire, mar y tierra, con la participación de la Armada, la Fuerza Aérea y el Cesfront.
En la frontera, operan varios batallones y destacamentos del Ejército, asegurando la presencia militar en municipios como Comendador, Duvergé, Pedernales, Jimaní, San Juan y Mao. Destacamentos como El Banano, Cabeza de Agua, Don Juan, entre otros, refuerzan la seguridad en la zona fronteriza. Esta intensa presencia militar tiene como objetivo garantizar la seguridad y evitar que la frontera sea utilizada como ruta de escape por bandas delictivas.
El presidente de la República ha destacado la llegada de un contingente policial de Kenia para apoyar a las autoridades haitianas en la recuperación del control del territorio y devolver la tranquilidad a la población afectada. La instalación de un gobierno democrático en Haití es un objetivo importante para la región, y las Fuerzas Armadas dominicanas están atentas para evitar que la frontera sea utilizada por delincuentes en fuga.
La seguridad de la frontera con Haití es la principal misión de las Fuerzas Armadas de la República Dominicana en este momento. El Estado Mayor General guía las operaciones para garantizar que la frontera no sea utilizada como ruta de escape por miembros de bandas delictivas y otros criminales. La presencia de tropas de Kenia y la cooperación internacional son clave en este esfuerzo.
Las Fuerzas Armadas dominicanas buscan llevar tranquilidad al país y a las poblaciones de las provincias fronterizas, como Pedernales, Independencia, Bahoruco, Elías Piña, Santiago Rodríguez, Montecristi y Dajabón. La seguridad en la frontera es un tema prioritario en estos momentos, y el compromiso de las autoridades es garantizar que la frontera no sea una vía de escape para delincuentes. La vigilancia y la colaboración internacional son fundamentales en este esfuerzo de protección fronteriza.
