Las religiones y filosofías relacionadas con el dharma, como el hinduismo y el budismo, provienen de orígenes indios y orientales. En el hinduismo, el dharma es uno de los componentes del Purusartha, los objetivos de la vida y los comportamientos acordes con el orden cósmico. Por otro lado, en el budismo, el dharma significa "ley y orden cósmicos" como lo expresó Buda, sobre quien se basan los fundamentos de esta filosofía de vida.

En la República Dominicana, a pesar de que la mayoría de la población es cristiana, también existen comunidades budistas e hindúes. A nivel mundial, alrededor de 1.2 mil millones practican el hinduismo y 520 millones practican el budismo, según el Pew Research Center. En el país, estas religiones coexisten con la sociedad dominicana y cuentan con comunidades como la Soka Gakkai Internacional y la comunidad Swaminarayan.

La comunidad budista en la República Dominicana está representada por la Soka Gakkai Internacional, un movimiento global de más de doce millones de budistas laicos centrado en la búsqueda de la paz, la armonía y el equilibrio. La práctica del daimoku, que consiste en repetir una frase significativa, es fundamental para ellos, permitiendo conectar con su potencial innato. Celebran festividades significativas en su centro y se enfocan en la reflexión y la meditación para enfrentar las adversidades con determinación y coraje.

Por otro lado, la comunidad hindú en República Dominicana se formó en 1983, centrándose en la adoración y meditación a dios bajo la deidad Swaminarayan. Esta comunidad se basa en principios éticos como no comer carne, no tener una vida licenciosa y no consumir drogas o alcohol. Su filosofía se divide en dos ramas, enfocándose más en la idea de una deidad personal a la que pueden comunicarse. Cuentan con un gran altar donde se representan diferentes deidades que simbolizan etapas en la evolución espiritual y cultural del hinduismo.

En el templo hindú, las deidades representan diferentes etapas en la evolución espiritual y cultural del hinduismo, incluyendo ideales de deber y rectitud, amor divino y devoción, y revitalización del hinduismo en un contexto de cambio social y religioso. A través de estas deidades, la comunidad busca promover el desarrollo personal y la espiritualidad activa en la vida diaria, enfatizando la moralidad, el bienestar social y la inclusión. Celebran festividades importantes y practican diversos rituales, como la meditación y la oración, en busca de paz interior y conexión espiritual.

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