El presidente del Consejo Unificado de las Empresas Distribuidoras de Electricidad (CUED), Celso Marranzini, atribuyó la situación energética actual de la nación a varios factores, incluyendo la alta demanda energética, transformadores de potencia en sobrecarga, conexiones ilegales, pérdidas de energía, energía no pagada, y la falta de inversiones en el sector. Marranzini anunció la ejecución de un plan a corto y largo plazo por parte del Gobierno para la recuperación del sector eléctrico en el país.
Marranzini detalló que las redes de distribución están operando en sobrecarga, lo que provoca interrupciones en el servicio eléctrico, y que actualmente hay transformadores de potencia en sobrecarga en las distribuidoras de electricidad Edenorte, Edesur y Edeste. Además, mencionó que las conexiones ilegales sobredimensionan el abastecimiento de los transformadores, causando cortes frecuentes en el servicio por averías. También señaló que cerca de 800,000 usuarios reciben el servicio sin pagarlo, lo que representa un problema histórico en el sector eléctrico.
Respecto a las subestaciones eléctricas, Marranzini explicó que las inversiones en este aspecto no se han realizado adecuadamente, y que muchas de estas subestaciones datan de los años 70 y ya no están a la altura de la demanda actual del país. El plan de recuperación del Gobierno incluye la reducción de las pérdidas de energía en las tres empresas distribuidoras de electricidad para el año 2027, con inversiones anuales de aproximadamente 300 millones de dólares para lograr los niveles buscados.
El Gobierno contará con el apoyo de la banca multilateral para financiar las inversiones necesarias en el sector eléctrico, con un total de 650 millones de dólares destinados a mejorar las redes y sistemas de gestión comercial. Marranzini detalló que se destinarán fondos para las subestaciones de Edesur, Edeeste, y Edenorte, así como para proyectos de alumbrado público, rehabilitación de redes, y sistemas de gestión comercial y de medición.
En cuanto a las estrategias a corto plazo, se busca implementar acciones administrativas como auditorías y presentación de estados financieros, así como estrategias operacionales que incluyen la compra de transformadores y medidores, acciones conjuntas entre las EDE para mejorar la eficiencia, y la realización de balances de carga para determinar las pérdidas de energía en los circuitos. El objetivo es mejorar la gestión en áreas con redes adecuadas, invertir en mejoras en redes donde sea necesario, y combatir el fraude en clientes de grandes consumos para reducir las pérdidas de energía en las distribuidoras.