El Centro de Corrección y Rehabilitación CCR-Las Parras, ubicado en el municipio Guerra, está saliendo del abandono en el que fue dejado debido a un proceso de investigación que detuvo cualquier intervención necesaria para su puesta en operación. A pesar de ello, la vía de acceso sigue mostrando deterioro y se observa la presencia ocasional de vehículos pesados que anuncian trabajos en el lugar. El acceso a las instalaciones es restringido y guardias se encargan de recordar que no se puede pasar ni tomar imágenes sin autorización. Actualmente, la empresa contratada para terminar la primera fase de construcción del penal, Consorcio Trifolis, está trabajando en la construcción de aulas educativas, talleres de costura, un edificio para visitas infantiles, entre otras obras.

El proyecto de Las Parras forma parte del Plan de Humanización del Sistema Penitenciario iniciado por la Procuraduría General de la República en 2018. El centro tendrá capacidad para más de 8,000 privados de libertad y busca dar solución a los problemas de hacinamiento en la cárcel La Victoria, la más grande del país. A la fecha, más de 40 edificaciones han sido levantadas en Las Parras, cuyos trabajos quedaron paralizados en 2021 debido a investigaciones relacionadas al caso Medusa, en el que se acusó al exprocurador Jean Alain Rodríguez de liderar una asociación de malhechores que cobraba sobornos a empresas adjudicadas en el proyecto.

Tras un acuerdo entre la Procuraduría y el Ministerio de Vivienda, Hábitat y Edificación (Mived), se han retomado los trabajos de ampliación en Las Parras. Además de las obras con el Consorcio Trifolis, el Mived abrió un proceso de licitación por más de 2,000 millones de pesos para terminar el centro. La inversión acumulada en Las Parras supera los 6,000 millones de pesos. La importancia de esta cárcel se hizo más evidente luego de un incendio en la penitenciaría de La Victoria en marzo pasado, que resultó en la muerte de 13 reclusos.

Aunque aún se observa el deterioro en la vía de acceso y la presencia de guardias restringiendo el paso, se ha visto progreso en las obras de construcción en Las Parras. El proyecto se considera una solución al hacinamiento en la cárcel La Victoria y forma parte de un plan de humanización del sistema penitenciario en República Dominicana. A pesar de los problemas y atrasos causados por investigaciones y escándalos de corrupción, se espera que Las Parras pueda estar en funcionamiento en un futuro cercano, brindando nuevas instalaciones para la rehabilitación de privados de libertad en el país.

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