El Ministerio de Economía, Planificación y Desarrollo (Mepyd) estima que en República Dominicana se podrían crear más de 127,000 nuevos puestos de trabajo para personas dedicadas al cuidado especializado de personas con discapacidad y adultos mayores. Actualmente, hay 1,000 personas capacitadas para desempeñar el rol de cuidadores a domicilio, como parte de la estrategia de política de cuidados que se está implementando a nivel nacional. Esta iniciativa busca diversificar los métodos de atención al usuario y abrir oportunidades de desarrollo para los familiares que se dedican a cuidar a un ser querido.

Se está llevando a cabo un plan piloto en Azua y Santo Domingo Este desde 2021, con la participación de 10 entidades de servicios públicos, para ampliar el acceso al protocolo de cuidados. El ministro de Economía, Pável Isa, presentó los resultados de un estudio que indica que la implementación de la política de cuidados podría reducir la pobreza monetaria en el país entre 6 y 1.9 puntos porcentuales. Según el estudio, 900,000 personas en República Dominicana dependen del cuidado de otros.

En el estudio se destaca que el 98 % de las personas dedicadas a tareas de cuidado y acompañamiento no remunerado son mujeres productivas. Muchas de estas mujeres desean insertarse en el mercado laboral, pero las responsabilidades de cuidar a otros les impiden buscar trabajo. La exclusión del mercado laboral limita su autonomía económica y acceso a otros derechos, y la sociedad pierde los aportes productivos de este grupo. La implementación de la política de cuidados crearía entre 285,000 y 78,000 empleos directos, lo que permitiría a las mujeres cuidadoras integrarse al mercado laboral y educativo si así lo desean.

Para poner en práctica la política de cuidados, se necesitaría una inversión recurrente de entre 3 y 0.9 % del PIB durante 10 años para cubrir el 90 % de la demanda de servicios públicos de cuidados. Esto tendría efectos positivos en la calidad de vida de quienes reciben cuidados y de quienes los proporcionan, fortaleciendo la estimulación temprana en la infancia, el desarrollo psicosocial y cognitivo en los niños, y la autonomía e integración social de los adultos con dependencias. Se espera que la puesta en marcha de esta política permita a entre 48,000 y 85,000 mujeres encontrar empleo gracias a la liberación de horas de trabajo de cuidado.

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