El director general de Migración, Venancio Alcántara, respondió a Amnistía Internacional, negando las acusaciones de violaciones de derechos humanos en los procesos de deportación de personas haitianas, dominicanos de ascendencia haitiana y de raza negra. Alcántara afirmó que los procesos de deportación se realizan conforme a la ley migratoria y respetando los derechos humanos, negando cualquier maltrato a los extranjeros trasladados a sus países de origen.
Alcántara rechazó cualquier injerencia en la política migratoria de la República Dominicana y afirmó que la institución que dirige es la única autorizada para aplicar la ley migratoria. Ratificó que continuarán con la deportación y repatriación de extranjeros ilegales respetando los derechos humanos y los acuerdos internacionales a los que el país está suscrito.
Amnistía Internacional, junto con otras organizaciones, denunció en una carta abierta las políticas migratorias de la República Dominicana, considerándolas discriminatorias racialmente y generando efectos discriminatorios para la exclusión de personas haitianas y dominicanas. Llamaron a las autoridades a garantizar el acceso de las personas haitianas a procedimientos de asilo sin discriminación y a reanudar las vías legales de entrada para migrantes que buscan residencia legal en el país.
En el primer trimestre de 2024, la Dirección General de Migración deportó a 28,318 extranjeros a sus países de origen por no cumplir con la ley migratoria. Además, otros extranjeros fueron reconducidos de manera voluntaria. En total, se repatriaron, deportaron o regresaron por cuenta propia 106,093 personas. Los deportados incluyeron a ciudadanos de Estados Unidos, Colombia, Cuba, Venezuela, Holanda, Italia y 28,304 haitianos.
La situación migratoria en la República Dominicana ha generado controversia y debate, con acusaciones de violaciones de derechos humanos y discriminación racial en los procesos de deportación. La respuesta de las autoridades dominicanas ha sido negar estas acusaciones y afirmar que se cumplen los procedimientos establecidos por la ley migratoria, respetando los derechos humanos y los acuerdos internacionales.
Es importante que las autoridades dominicanas y las organizaciones internacionales trabajen en conjunto para garantizar el respeto a los derechos humanos de todas las personas, independientemente de su origen o nacionalidad. La transparencia en los procesos migratorios y el respeto a la dignidad de los individuos deben ser prioritarios en la política migratoria del país para evitar violaciones y discriminación.