La Dirección General de Migración (DGM) explicó que un incidente entre un sargento de la Policía Nacional y el personal migratorio se aclaró en el momento de la detención y el agente fue liberado después de mostrar sus documentos. Sin embargo, el sargento intentó agredir a los agentes migratorios y los insultó, aunque estos ignoraron sus improperios y no lo maltrataron físicamente. La DGM destacó que la Policía Nacional brinda gran apoyo a la institución y que los operativos se realizan cumpliendo la ley y respetando los derechos humanos.

El sargento Solís Contreras denunció que fue agredido por tres agentes de la DGM con palos, quienes lo confundieron con un ciudadano haitiano durante un operativo en Santiago. Presentó una querella en la fiscalía y un informe del Inacif certificó que tenía golpes en la cabeza y el costado derecho, así como edema y equimosis en el brazo. La DGM llamó la atención sobre el comportamiento del agente, recordando que los operativos se realizan respetando la integridad física de los ciudadanos y la ley vigente.

La DGM resaltó que los agentes migratorios llamaron a su superior para informar sobre el incidente y la reacción del sargento Solís Contreras. A pesar de los insultos y los intentos de agresión por parte del agente, no hubo maltrato físico hacia él por parte del personal migratorio. La institución recalcó que los operativos de interdicción se realizan con respeto a la ley y a los derechos humanos, y lamentó el comportamiento inapropiado del sargento de la Policía Nacional.

El sargento Solís Contreras denunció que fue confundido con un ciudadano haitiano y agredido por agentes de la DGM durante un operativo en Santiago, utilizando palos para golpearlo. Presentó una querella en la fiscalía y un informe del Inacif confirmó sus lesiones. La DGM insistió en que los operativos se realizan de acuerdo con la ley y respetando los derechos humanos, y señaló la importancia del apoyo de la Policía Nacional a la institución migratoria.

La DGM hizo hincapié en que los agentes migratorios respetaron la integridad física del sargento Solís Contreras a pesar de sus intentos de agresión e insultos. Llamaron la atención sobre su comportamiento inapropiado y recordaron que la cooperación entre la Policía Nacional y la DGM es fundamental para garantizar la seguridad y el respeto a la ley en los operativos de interdicción. La institución reiteró su compromiso con el cumplimiento de la ley y el respeto a los derechos de todos los ciudadanos durante estos procedimientos.

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