En República Dominicana, la nueva Constitución reafirma la tendencia regional de limitar los períodos presidenciales, prohibiendo la reelección consecutiva y modificaciones en beneficio del presidente en funciones. En otros países latinoamericanos, como Brasil y Ecuador, la reelección presidencial está permitida por un solo período adicional. En Argentina, se puede reelegir por un período adicional con pausas entre mandatos. Mientras que en Uruguay, Panamá, Perú y Costa Rica se permite la reelección diferida, con un tiempo de espera entre el fin de un mandato y la posibilidad de volver a postularse.
En Costa Rica, la reelección inmediata fue prohibida en 2003, reinstaurando la norma de alternancia en el poder. En Uruguay, el presidente y vicepresidente deben esperar cinco años antes de volver a postularse, según lo establece la Constitución. En Panamá, los exmandatarios no pueden regresar al poder en los dos períodos presidenciales inmediatamente siguientes. En Perú, la no reelección inmediata del presidente fue establecida en el año 2000 para evitar la concentración del poder y reforzar la estabilidad democrática.
En algunos países de América Latina, como Venezuela y Nicaragua, se permite la reelección presidencial indefinida. En Venezuela, una reforma constitucional aprobada en 2009 eliminó las restricciones a la cantidad de mandatos consecutivos, permitiendo la reelección indefinida. En Nicaragua, una reforma constitucional en 2014 permitió al presidente optar a un número ilimitado de mandatos, consolidando la continuidad presidencial sin restricciones temporales. Estas medidas han generado debate sobre sus implicaciones democráticas en la región.
La limitación de períodos presidenciales en América Latina busca garantizar la alternancia en el poder y evitar la concentración del mismo en una sola persona. La reelección consecutiva, diferida o indefinida plantea desafíos a la democracia y al sistema político de los países de la región. La prohibición de la reelección inmediata, la imposición de periodos de espera entre mandatos y la limitación de la cantidad de períodos presidenciales son medidas adoptadas para fortalecer la estabilidad democrática y prevenir la perpetuación en el poder. La discusión sobre los límites a la reelección presidencial continúa siendo un tema relevante en la región.