La juramentación de Luis Abinader para un segundo mandato constitucional se convirtió en un foro internacional en el que se emitió una declaración auspiciada por varios países que solicita al Gobierno de Venezuela respetar la Convención de Caracas sobre asilo diplomático, los derechos de los votantes y expresar el rechazo a la represión y violencia postelectorales en el país sudamericano. Representantes de más de 20 países llamaron a la publicación inmediata de las actas de los comicios presidenciales del 28 de julio, así como a una verificación imparcial e independiente de los resultados de las elecciones en las que Nicolás Maduro fue reelegido para un tercer mandato, decisión que es controversia. Argentina, Canadá, Chile, República Checa, Costa Rica, Ecuador, España, Estados Unidos, El Salvador, Guatemala, Guyana, Italia, Marruecos, Países Bajos, Panamá, Paraguay, Perú, Reino Unido, Surinam, Portugal, República Dominicana, Uruguay y la Unión Europea hacen un llamado a la sensatez y cordura en Venezuela.

Además, estos países abogan por una solución genuinamente venezolana a la crisis postelectoral, en la que prevalezcan la democracia, la justicia y la paz. Se insta a que Venezuela honre el legado del diálogo y el entendimiento para recuperar la convivencia pacífica, la seguridad pública y la estabilidad política. Asimismo, se destaca la necesidad de un diálogo amplio, inclusivo y de buena fe para facilitar un acuerdo político y se expresa apoyo a los esfuerzos para lograr la reconciliación nacional, reconociendo la importancia del diálogo en situaciones de crisis.

La relación entre la República Dominicana y Venezuela ha enfrentado altibajos a lo largo de casi ocho décadas, marcada por distintas coyunturas políticas y sucesos. Venezuela es uno de los siete Estados con los que el Gobierno venezolano ha roto sus vínculos diplomáticos alegando injerencia en sus asuntos internos. Los signatarios de la declaración esperan que el Gobierno venezolano expida los salvoconductos necesarios para permitir la salida segura de seis personas asiladas en la residencia oficial de la República Argentina.

Durante su investidura, el presidente Abinader condenó los atropellos contra las instituciones democráticas y la violencia política en Venezuela, exigiendo la publicación y verificación de todas las actas electorales. El mandatario expresó su compromiso con la democracia y su apoyo a la transparencia en los procesos electorales. Además, abogó por el respeto a la voluntad soberana del electorado venezolano y la construcción de una salida pacífica a la crisis. La Organización de los Estados Americanos aprobó una resolución exigiendo a las autoridades venezolanas la publicación expedita de las actas de las elecciones del 28 de julio en el país, en línea con lo declarado en Santo Domingo.

La resolución insta al Consejo Nacional Electoral de Venezuela a publicar las actas con los resultados de la votación en cada mesa electoral y a respetar el principio de la soberanía popular a través de una verificación imparcial de los resultados para garantizar la transparencia y legitimidad del proceso electoral. Además, se pide proteger y preservar los equipos utilizados en el proceso electoral y las instalaciones diplomáticas en Venezuela. La resolución busca una salida pacífica a la crisis y el respeto a la voluntad soberana de los venezolanos. Anteriormente, otra resolución similar había fracasado en la OEA, pero esta vez contó con consenso entre los países miembros.

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