La Inversión Extranjera Directa (IED) en América Latina cayó un 9.9% en 2023, hasta los 184,304 millones de dólares, pero sigue por encima del promedio de la última década. La región enfrenta desafíos para atraer inversiones y mejorar su desarrollo, según la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), que presentó su informe anual. La entrada de IED en el año pasado no logró mantener los niveles de 2022, reflejando los desafíos económicos globales, especialmente en países como Brasil, México, Perú, Argentina y Chile.

En América Latina, la disminución de los flujos de IED en Brasil (-14%) y México (-23%) impactó el resultado total de la región, según el informe de la Cepal. Sin embargo, otros países como Argentina y Chile experimentaron un aumento en las entradas de IED. En Centroamérica, la mayoría de los países recibieron más IED, destacándose el crecimiento en Costa Rica y Honduras. En el Caribe, el aumento se debe al incremento en Guyana y República Dominicana, especialmente en la industria manufacturera y de dispositivos médicos.

A pesar de la caída general, el 46% de la IED se destinó al sector de servicios, con un aumento en la inversión en manufactura en países como Colombia, México y República Dominicana. El director de la Cepal destacó que la reinversión de utilidades mostró un aumento significativo, lo que indica el interés de las multinacionales en expandirse o permanecer en las zonas donde operan. Se espera un aumento en los anuncios de futuras inversiones, que ya alcanzan los 115 millones de dólares.

La Cepal resalta la importancia de la IED para superar los desafíos de desarrollo en la región, especialmente la falta de capacidad para crecer. La atracción de inversiones debe ir más allá de la inversión inicial, considerando lo que sucede una vez que las empresas se establecen en la región. Estados Unidos y la Unión Europea fueron los principales inversionistas en 2023, seguidos por China. Se busca agregar más valor a los recursos naturales, diversificar la economía y fomentar los encadenamientos productivos derivados de la inversión extranjera.

La Cepal revisó al alza la proyección de crecimiento económico para la región en 2024, aumentando del 1.9% al 2.1%. Se espera que la economía latinoamericana mejore en el próximo año, a pesar de los desafíos actuales. La atracción de IED juega un papel fundamental en el desarrollo de la región, por lo que se deben implementar políticas efectivas para atraer inversiones y fomentar el crecimiento económico sostenible. La colaboración con socios internacionales, como Estados Unidos, la Unión Europea y China, es clave para fortalecer la infraestructura y mejorar la competitividad de América Latina y el Caribe.

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