El sector de las bebidas no alcohólicas contribuye significativamente a la economía dominicana con importantes aportes en empleos directos e indirectos, generación de nuevas inversiones y contribuciones al tesoro, como se demostró en la presentación del estudio "Análisis de las contribuciones de la industria de bebidas en la economía dominicana", realizado en una reunión celebrada en la Asociación de Industrias de la República Dominicana.

En la reunión con la Asociación de Bebidas No Alcohólicas de la República Dominicana (Asibenas), el presidente de la AIRD, Julio Virgilio Brache, destacó que las industrias de bebidas no alcohólicas son un sector próspero e innovador que atrae inversiones locales y extranjeras y que está centrado en las necesidades del consumidor en cuanto a su cuidado de la salud, protección del medio ambiente, y desarrollo económico y social sostenible.

Brache resaltó la presencia de estas empresas en el desarrollo industrial del país, su vinculación con otros sectores como el comercio minorista, la industria hotelera y el sector restaurantero, así como su participación en cuestiones como la economía circular y la alianza por el bienestar y la alimentación consciente.

El presidente de Asibenas, Juan Amell, destacó que el éxito del sector que representa "ha sido posible gracias al favorable entorno de inversión que caracteriza a la República Dominicana, la estabilidad y crecimiento de la economía, la receptividad del mercado a nuestros productos, pero sobre todo, al gran esfuerzo y dedicación excepcional de más de 60,000 empleados que han sido auténticos protagonistas de nuestra historia".

Amell señaló que otro elemento clave de ese éxito ha sido la colaboración con aliados en el sector, especialmente tiendas de abarrotes, supermercados y otros actores en el sector comercial, que representan el 90% del canal de distribución, así como la industria hotelera, que incluye hoteles, bares y restaurantes.

El sector de bebidas no alcohólicas contribuye al 1% del PIB y genera más de 60 mil puestos de trabajo. Es un sector que contribuye al desarrollo sostenible de las comunidades, promueve el empoderamiento del consumidor, fomenta la innovación en categorías de productos y empaques, y reconoce la importancia de centrarse en la alimentación consciente. El estudio muestra que el sector realizó compras locales por RD$24,317 millones en 2022, generando más de 63,190 empleos, con contribuciones directas al tesoro que superan los RD$15,605 millones.

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