El gobierno de la República Dominicana mantiene numerosos programas sociales. El representante de la FAO en República Dominicana, Rodrigo Castañeda, pidió al gobierno dominicano que continúe desarrollando programas alimentarios para reducir el hambre, a pesar de que se retiró el proyecto de ley de "Transformación Fiscal". Castañeda señaló que la administración pública debe seguir trabajando para reducir los índices de falta de alimentos en la población. A pesar de la falta de recursos, Castañeda destacó el progreso del país al registrar una disminución en los índices de subalimentación del 8.3% en 2020 al 4.6% en 2023, liberando a 500,000 familias de la escasez de alimentos.

El informe indica que este progreso es resultado del fortalecimiento de los programas de alimentación escolar, la ayuda social a través del programa Supérate y la expansión de los comedores económicos. Además, el Instituto Nacional de Estabilización de Precios (Inespre) estableció más mercados abiertos para una mejor distribución a más de 1.5 millones de ciudadanos vulnerables. Castañeda emitió estas declaraciones durante su participación en el primer foro nacional sobre alimentación escolar, celebrado en la Cámara de Diputados, el Instituto Nacional de Bienestar Estudiantil (Inabie) y el Programa Mundial de Alimentos (PMA).

Por otra parte, varias comisiones legislativas estudiaron proyectos de ley relacionados con el desarrollo de las familias dominicanas. El proyecto de reforma fiscal fue retirado de la Cámara Baja el martes pasado por el presidente Luis Abinader, en respuesta a su amplio rechazo en la sociedad, lo que provocó protestas aisladas en varias provincias del territorio nacional. A pesar de la retirada del proyecto de ley, se espera que todos los programas sociales se mantengan, ya que proporcionar alimentos a dos millones de niños resulta fundamental para combatir el hambre en el país.

En general, el gobierno dominicano ha logrado avances significativos en la reducción de la subalimentación y el fortalecimiento de programas sociales para ayudar a las familias vulnerables. La FAO está alentando a la administración pública a seguir trabajando en estas áreas para garantizar la seguridad alimentaria de la población. A pesar de los desafíos y la falta de recursos, el país ha logrado progresos notables en la lucha contra el hambre y la subalimentación, liberando a muchas familias de la escasez de alimentos. Este enfoque en programas de alimentación escolar y asistencia social demuestra el compromiso del gobierno dominicano en mejorar la calidad de vida de sus ciudadanos más necesitados.

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